miércoles, 2 de julio de 2014

El circo de las drogas en la ONU

Este texto fue publicado hace un mes o así en la Revista Yerba.
No hace falta decir nada más.
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El circo de las drogas en la ONU.

En el mes de marzo del 2014 se celebró en la ciudad de Viena un encuentro internacional de los responsables de drogas de cada país ante las Naciones Unidas, bajo el auspicio de la 'Comisión sobre Drogas Narcóticas', conocida como CND2014. Dicha comisión está enmarcada dentro del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas y existe formalmente desde el año 1946, encargándose de los asuntos relacionados con la prohibición de las drogas narcóticas


El jefe de la ONU tras una mala pastilla que se comió.


¿Sólo de las narcóticas? ¿Y qué pasa con las estimulantes y las psiquedélicas, por nombrar otras? No se deje el lector engañar por el nombre: controlan todas las drogas desde hace décadas pero como no sabían como referirse a ellas, optaron por bautizarlas así aunque en realidad narcóticas sólo sean una parte de esas sustancias.

A esa reunión, de varios días y larga agenda, España mandó un nutrido grupo de representantes oficiales que -por la longitud del listado de asistentes- estaba a la altura de países como USA, México o Rusia y muy por encima de lo enviado por países como Holanda, India o Israel

¡Y no es para menos! En reuniones “así de importantes” se deciden cuestiones que nos afectan gravemente a todos los ciudadanos en materia de drogas. ¿Y quiénes son los que fueron a hablar por nosotros? Pues gente seria y responsable, no seáis desconfiados. Para empezar, el primero de la lista es Francisco de Asís Babín, un conocido de todos por su inestimable trabajo al frente de nuestro tan hispano 'Plan Nacional Sobre Drogas' o PNSD. Antiguo licenciado en medicina que ahora trabaja defendiendo -en rango de Delegado del Gobierno- lo que el Gobierno hace y deja de hacer en materia de drogas, como por otra parte es su función ya que es nombrado desde el mismo con el método de la clásica democracia digital: a dedo.


Paco Babín a punto de iniciar el vuelo.

¿No teníamos nada mejor que enviar? No vayan a preocuparse todavía, que aún hay más. La segunda persona mencionada en el listado oficial de asistentes (no es por orden alfabético) es Carmen Buján Freire, una diplomática “de carrera” que está especializada... en terrorismo


¿Pero esto no iba de drogas? Lo más curioso es que esta señora es la representante permanente en Viena ante Naciones Unidas de nuestro país. ¿Qué tendrá de raro? Pues lo extraño de su presencia es que ella fue situada en dicho cargo -de alta importancia estratégica- en un nombramiento del gobierno del presidente Zapatero en el año 2010. Han pasado unas elecciones y hay un gobierno de otro signo desde hace varios años en el poder en España, pero eso no es relevante porque no se ha cambiado a esa persona. La realidad no esconde mucho truco: la política de drogas del PSOE y del PP es igual y no reviste diferencias reales, mucho menos a nivel internacional. Si el actual presidente Rajoy no ha cambiado a esa persona es porque cumple la función que de ella esperan y parece ser que es capaz de cumplirla igualmente para ambos partidos gobernantes

No hay tampoco noticia alguna de que su puesto vaya a sufrir el menor cambio, exactamente igual que la política de drogas en el país: todo acorde y en sincronía. El resto de asistentes a dicha cumbre son los políticos y sus asesores técnicos, en inteligencia, exteriores y algún representante del área sanitaria y social, en un vano intento de dar algo de vida y color a la infumable lista de “la selección roja” en este asunto.



Estas personas han de decidir en la reunión mundial de mayor nivel sobre drogas cómo va la política y qué cosas habría que modificar. A la vista del fracaso estrepitoso de la guerra contra las drogas que han cosechado en un siglo de prohibición sería de esperar que hubiera rápidos cambios. Pero rápido y política son dos términos antagónicos. Aun así había muchos temas que tratar así que se organizó como un circo de muchas pistas con distintos temas, en el que los actores no eran “personas” sino países.



La pista del domador legal y la temible fiera de la 'decriminalización'.


El enfoque punitivo sobre la gestión de la producción y la distribución de drogas es un error ya certificado globalmente, pero más terrible es el enfoque punitivo sobre consumidores de drogas. En este aspecto, las lineas generales de recomendación surgidas del CND2014 para el mundo son que “no debemos tratar a los consumidores de drogas como desviados sino como enfermos” y por lo tanto no debemos criminalizarles por ello -ya que esto dispara las tasas de infección de SIDA y hepatitis- aunque ven lógico que la represión se produzca en otras áreas como la económica vía multas. 

¿Esto qué quiere decir? Pues que la ONU nos recomienda “avanzar” hasta la Ley Corcuera o de Seguridad Ciudadana 1/1992, esa por la que nos multan cuando nos cachean indiscriminadamente y tenemos droga encima para nuestro propio consumo. 

Mandril sin estudios que hizo la Ley de Seguridad Ciudadana.
Sólo puede pasar en España y en el PSOE.


A nivel real para España las directrices surgidas de esa pista no tienen valor alguno, ya que aquí el consumo de drogas es un derecho del individuo y lo que se sanciona -en una esquizofrénica pirueta legal- es la tenencia en lugar público, como la calle. Por otra parte es interesante saber que España tiene más de 22 años de adelanto con respecto a dichos consejos y que ¿para qué va a cambiar nada, no?
Del autocultivo de cannabis y esas otras opciones... ya tal.


Verde que te quiero verde.


Esa pista tiene sentido para muchos países en que el consumo de drogas o la tenencia de las mismas puede suponer cargos de tipo criminal y eso les ha hecho saturar sus cárceles sobremanera. Los primeros pasos los dio Portugal en 2001 con una decriminalización que pasaba a multas las sanciones criminales por drogas para consumo propio y en el año 2009 la República Checa con el mismo paso, sin haber contado con ningún organismo internacional para hacerlo: soberanía nacional se entendió y no hubo ningún problema.

Con ese acercamiento -bastante antiguo en realidad- al problema pues uno se evita tener que introducir a simples consumidores en el sistema judicial y penal del país, evitándose una carga que se ha demostrado que satura el sistema hasta hacerlo inviable, aparte de ser una agresión contra las personas usuarias de drogas que no hace sino agravar los posibles problemas o crearlos si no existían (un proceso penal no es ninguna broma, chicos, y os puede joder la vida) al hacer a la persona tener que enfrentarse a requerimientos intromisorios que violan libertades fundamentales. 

Dicho de otra forma: tenemos las cárceles llenas!! Estamos que lo tiramos!! ¿Qué hacemos con tanto preso porrero y el gasto que nos suponen al estado? Pues soltarles y mandarles a la puta calle.

Ese es el espíritu que impulsa -nada de caridad ni piedades varias- lo que ahora se están llamando “Política de Clemencia” para los delitos de drogas que no implicasen violencia y daño a terceros. De mano de los increíbles USA llega esta bofetada refrescante: tras haber creado hasta cárceles privadas ahora deciden ser “clementes” y no joderle la vida a esos fumetas y pastilleros que tienen presos sin haber dañado a nadie (más que a ellos mismos en el peor de los casos).

Debemos recordar que en USA hay personas cumpliendo cadenas perpetuas sin haber causado daño a terceros por delitos de drogas. Así que en esta pista del circo podremos ver como se torna el concepto de “usuario de drogas vicioso” a “usuario de drogas enfermo que hay que tratar” y realmente no sé cuál da más miedo, tras ver a Grecia en Europa y a otros países por el mundo usando campos de internamiento con usuarios de drogas, inmigrantes y seropositivos.

Nos llegará de oídas esta ola de “clemencia por esos pobres diablos que han perdido su alma por consumir drogas” y que saturan sus cárceles hasta hacerlas campos de concentración y hacinamiento de humanos, pero en España no tendrá ninguna repercusión ya que aquí hace décadas que el simple consumo de drogas se paga con multas y no con la cárcel, aunque siga siendo igualmente una descarada penalización sobre un derecho individual. Aunque no debemos de perder la vista a países como Ecuador que están implementando una valiente política que implica reconocer a las “mulas” que transportan drogas con estatus de víctimas en lugar de tratarles como criminales, en un decidido paso a no repercutir los daños de la prohibición internacional de drogas sobre su propia población sometida a la necesidad de sobrevivir en mitad de un país de tránsito de las rutas de la cocaína.


La pista del funambulista sin red sobre la pena de muerte.

Mientras unos países discutían lo de no meter en la cárcel a la gente por consumir drogas y tratarlos como enfermos -englobando hasta tratamientos forzosos en países de nuestra esfera cultural como los USA- otros países se divertían hablando de sus números en la guerra contra las drogas con sus estadísticas de sentencias de muerte por tráfico e incluso simple posesión de drogas

Estos ya no usarán más drogas.


Eso deja claro que esta gente se lo toma en serio: ni una broma con las drogas que son malas. Mejor ejecutados como hace China y otros cuantos países de su influencia cultural en Asia. Pero no son los únicos porque la furia de las aplicaciones integristas de los asuntos morales convertidos en legislación, deja decenas de cadáveres colgando de grúas, ahorcados en las plazas públicas de las ciudades de Irán y otros países islámicos que no tienen problemas en aplicar la pena de muerte con el añadido de la exhibición pública, como en los mejores tiempos de la inquisición española con la quema de brujas y herejes. Como penas menores, muchos tienen la amputación de miembros -manos, orejas, nariz- del criminal para ayudarle a reconvertir su vida en algo más provechoso para toda la sociedad.

En esta pista del circo fue Suiza la que -con el apoyo de otros países- tuvo un valiente intento de que se reconociera por parte de los asistentes que la pena de muerte era una política totalmente desproporcionada en asuntos por drogas y que eso se incluyera en una declaración conjunta. Parece algo razonable a los ojos de un Europeo, pero no parece ser igual en países que aplican la pena de muerte por las más variadas razones. ¿Por qué no a los que andan con drogas y sí a otros? La respuesta seguramente sería que es atroz utilizar la pena de muerte como herramienta de control, pero eso no suena bien a los oídos de China, Irán y otros cuantos países de instintos similares que cómodamente bloquearon con su derecho a veto que tal declaración conjunta saliera adelante.

¿Y qué dijo España ante algo así? ¿Lo sabe usted? Nosotros tampoco. España como otros cuantos países no querían líos con la pena de muerte y menos con China, a quien hace poco hemos molestado con la causa penal que se seguía en base a la jurisdicción universal, así que optamos por mirar a otro lado. 


Pena de muerte Marca España.



Total, otros muchos países “civilizados como USA” tienen la pena de muerte entre sus herramientas y no somos tan críticos ¿verdad?




La pista del neolenguaje y la reducción de riesgos.

En estos años de dura travesía del desierto de la prohibición, en el que las únicas medidas realmente eficaces se han dado a través de los programas de 'reducción de riesgos' -en su versión inglesa 'Harm Reduction' o reducción de daños- no son pocos los países que de una forma sincera se han acercado a esa aproximación al asunto de las drogas y sus usuarios. Para quien no conozca estos programas su principal característica es el trato con el usuario de drogas sin juzgarle ni criminalizarle por sus consumos y, en lugar de ello, ayudarle a reducir los daños y riesgos derivados de ellos

Abarcan el trato en lugares como las 'narcosalas' donde las personas consumen drogas con una cierta supervisión de profesionales, los programas de análisis de drogas que desarrollan algunas ONG y que son el primer punto de alarma ante partidas adulteradas de forma peligrosa para la salud de sus usuarios, llegando hasta la educación del usuario de drogas -y del no usuario- para que puedan tomar decisiones informadas sobre el consumo o abstinencia. 

Entre otras muchas áreas enfocadas en prevenir problemas -como la difusión del SIDA mediante el reparto de jeringuillas nuevas a usuarios- algunas resultan especialmente rentables: evitar un contagio de SIDA cuesta entre 100 y 1000 dólares. Si a alguien le parece caro que piense el coste de un año de atención, pruebas y tratamientos en un seropositivo.

Sí señores, el SIDA / VIH sigue existiendo y matando gente.


Desde hace años los países más avanzados saben de sobra que la reducción de riesgos es el enfoque más efectivo, humano e inteligente del asunto de las drogas bajo la prohibición, pero eso no ha impedido que varios de ellos consiguieran bloquear que se mencionase en la declaración final a la reducción de riesgos bajo ese nombre. Se puede hablar de ella pero se ha de usar un eufemismo que es algo así como “medidas para paliar el daño provocado por el consumo de drogas en la población” según se expresa en las guías técnicas que la ONU tiene publicadas. 

Sí, queridos lectores, en eso se gastan la pasta; en decirnos cómo debemos llamar a las cosas, como siempre por nuestro bien. ¡Gracias ONU!



Todo circo tiene un payaso y una próxima vez: UNGASS2016.


Al mando de todo este montaje está un ruso, apéndice directo de Putin, llamado Yuri Fedotov. El personaje es irrelevante en sí de no ser porque es quién refrenda la política internacional de drogas. Y entre otras la rusa, que le niega tratamiento a los adictos (no aceptan metadona ni buprenorfina legal) en su país hasta forzarles a recurrir a venenos como el 'krokodil' o que ha cerrado el paso a toda la metadona que recibían los adictos en tratamiento en Crimea, tras la anexión rusa de hace semanas.

Aquí el payaso Yuri 
explicando cómo manejar
 las drogas en el caribe.


Yuri es el payaso triste que una vez fue el payaso alegre. Si algo ha quedado claro en la reunión es que el consenso sobre drogas a nivel internacional está hecho añicos si es que alguna vez llegó a existir. Para enfrentar -de nuevo- la situación con las drogas, tras probar a crear un mundo sin drogas y ver que eso es imposible, varios presidentes en activo de países miembro de la ONU han solicitado, hasta conseguirla, una Asamblea General sobre Drogas en Sesión Extraordinaria que ya se conoce como UNGASS2016 donde se revisará la política global de drogas, pero no con simples enviados diplomáticos sino con los presidentes de cada nación.

Esa será la reunión de jefes de tribu -presidentes y mandatarios, perdón- más importante sobre drogas y que se adelanta varios años con respecto a lo esperado debido a la situación internacional. Lo mejor que ha salido del CND2014 han sido los grupos que se han formado para preparar la agenda de UNGASS2016, aunque haya habido episodios tan lamentables como el que vivió el Representante de Uruguay en la Organización de Estados Americanos cuando le dijeron que Uruguay y Paraguay eran lo mismo. No contenta la persona con su inteligente comentario insistió en él hasta que los representantes de Uruguay se levantaron y se fueron de la reunión.

México -con 60.000 muertos en 6 años- y otros países de América se desangran por el tráfico de drogas que USA -y Europa- consume y paga en plomo y armas. Los países de tránsito ponen los muertos a base de población civil en un desequilibrado mercado que nadie es capaz de frenar y que necesita de una sincera y honesta regulación que permita a los adultos decidir libremente sobre el consumo o no de sustancias y hacerlo de forma segura para ellos y para los demás. 
El mercado existe y no desaparecerá: dejar que lo controlen las mafias sería un nuevo error fatal que todos pagaríamos de nuevo.

No será hasta el año 2016 cuando podamos ver si el mundo está ya listo para dar el volantazo a la criminal política de drogas seguida por la ONU al dictado de USA o si, por el contrario, necesitaremos de otros cinco o diez años más para acabar con una política que ha hecho a todos los seres humanos las víctimas de las opciones morales de unos pocos. Lo que sí sabemos es que no ocurrirá sin mucho trabajo por parte de los activistas.

Canutos para la paz.


¿O alguien se cree que con este circo montado se puede cambiar el espectáculo tan pronto?
Esperemos lo mejor y preparémonos para lo peor; mientras tanto a seguir remando hasta UNGASS2016.


domingo, 15 de junio de 2014

Regulación del cannabis con el modelo yo-te-vendo: Canadá.


Este texto, no recuerdo el título, apareció en Yerba hace unos meses.
Aunque arrancaba metiendo miedo, parece que en Canadá se han echado un poco atrás -digo parece porque nunca me creo nada- y que de momento no acometerán el asunto de esta forma. Esto queda dicho para que no venga nadie diciendo "está mal, no ha sido como dice el primer párrafo". O que si lo hace quede como lo que es.

Esto es lo que estaba encima de la mesa: "te dejo fumar petas y lo que tú digas, pero la pasta(za) pa' mí".
Y como Canadá es tan avanzado igual aquí, que somos retrasados, lo importamos.
Sirva de aviso.

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El día 1 de abril de 2014 las normas que -hasta ahora- han regulado en Canadá la producción de cannabis van a cambiar radicalmente con graves consecuencias. A partir de dicha fecha, aquellas personas que habían realizado la correspondiente solicitud para cultivar cannabis por razones medicinales y que ostentaban una licencia -también controlada por el estado- que les permitía cultivar para suplir sus propias necesidades, pierden ese derecho.

¿Qué ha conducido a una situación así en la que se da marcha atrás a un derecho personal?
No hay detrás de esta acción ningún tipo de valoración moral sobre el consumo, ni de cambio en la perspectiva con que se aborda su uso medicinal, y el gobierno asegura que todos los pacientes tendrán acceso al cannabis para uso medicinal con menos trámites de los que eran necesarios antes: y es cierto. Los trámites para obtener cannabis serán menores, porque ese trámite se pasará a llamar dinero.

Canadá se enfrenta la privatización de un derecho, de la misma forma que le ha ocurrido a España con la sanidad o la educación en buena parte. Canadá va a privatizar la marihuana, queridos lectores, y lo va a hacer hablando de regulación porque eso es lo que vende más en estos momentos en que se está derrumbando el burdel prohibicionista.


Ésta y no otra es la razón
por la que de momento
no puedes cultivar tu propio cannabis.
El gobierno quiere su parte.


El gobierno del país se ve ahora inmerso en el cambio de paradigma que se avecina con la obsoleta guerra contra las drogas y aborda su propia versión del experimento regulador empezando -como parece lógico- por el cannabis y atendiendo a una de las cuestiones que los antiguos modelos usados para tratar con la marihuana no querían tocar: el control de la cadena de producción.

Uruguay abrió la carrera con la regulación del cannabis de forma estatal, incluyendo su producción y venta pero sin impedir que todo el mundo tuviera derecho a cultivar su propio cannabis, dándole hueco al exceso de producción dentro de la cadena de venta legal en Uruguay. 




Ahora en USA, las declaraciones de Obama de que el cannabis no es peor que el alcohol o el tabaco, apuntan a un cambio en la política a nivel federal -que aún no se ha modificado- y que sigue siendo el mayor escollo en una regulación legal y efectiva del cannabis para todos los estados, que de momento se tienen que ir ganando mediante votaciones que les enfrentan al gobierno federal: son los restos de la esquizofrenia legislativa que esta guerra ha dejado y que ahora hay que recortar. Pero la visión en USA ya ha cambiado: el cannabis será legal en todo el país en pocos años y ahora hablar de marihuana es hablar de un mercado de muchos miles de millones de dólares en ventas directas y al menos otro tanto en los mercados asociados. 

Colorado y Washington con el salto cualitativo que supone el autorizar a la población a comprar y consumir cannabis de forma recreativa han dado un salto de gigante que ya no se puede revertir.

Sin perder de vista esos dos países, uno por ser el primero en atreverse (aunque es un país muy pequeño) y el otro por ser el que ha marcado la tendencia mundial en materia de drogas y su casi único vecino, Canadá aborda su propia versión del un experimento regulador con un modelo totalmente económico que no espera a cambios en las leyes globales: la marihuana sigue siendo un bien -por el momento- controlado que sólo empresas autorizadas pueden cultivar y sólo consumidores autorizados pueden comprar.


Así sale ahora 
de la planta de cannabis
lo que te tienes que fumar
si quieres ser legal.



La cosa no es baladí porque en Canadá hay 37.000 personas que usan el cannabis de forma medicinal -de forma registrada y autorizada- y cultivan sus propias plantas. Ese ha sido el modelo de abastecimiento más común, junto con los clubes de venta de marihuana médica, que vivían en un régimen más inseguro en cuanto a la producción o distribución de cannabis. La propia policía aplaude la medida, pero no por una cuestión contra el cannabis, sino porque les quita trabajo: a partir del día 1 de abril en Canadá, la policía no tendrá que preguntarse si el cultivo que han descubierto pertenece a un paciente autorizado a cultivar su propia marihuana, porque no existirán dichos auto-cultivos: todos serán ilegales.

Canadá admite que existe un mercado obvio de cannabis y que hay que abastecer la demanda o será dominada por el mercado negro de una u otra forma, y es ahí donde cruza la visión economicista de los canadienses y se frotan las manos con el mercado que hay detrás del muro que va a caer: grandes sumas de dinero esperando a ser recolectadas bajo la apariencia de verdes cogollos.

No confundamos ese movimiento con lo que sería una acción de toma de mercado para quitarle posición al narcotráfico porque no lo es: en este caso el mercado ilegal no se verá afectado y se creará un nuevo mercado que anteriormente se auto-abastecía cultivando y evitando así recurrir al mercado negro o al legal, que tienen precios mucho más altos que los meramente generados por los costes de producción de tu propia cosecha, que es el derecho que se pierde.

Facilitando la labor de la policía sin tocar el derecho último a acceder a la droga, tan sólo tocando la vía de adquisición, el estado abre un cauce aunque es tan solo económico pues todos se verán obligados a comprarla a empresas que la produzcan de forma masiva y que están atrayendo grandes montos de inversión de capitales de riesgo con los ahora llamados “venture capitals” que prometen grandes beneficios en corto tiempo. Como vienen siendo habitual en el “nuevo orden mundial” ese dinero no lo va a dar el estado sino que saldrá del espinazo de los consumidores, y en este caso más sangrante, de los consumidores con licencia médica para cultivar su propio cannabis.

Mi propuesta 
para volver a dialogar 
los temas sobre drogas.


A la hora de explicárselo a la población, el gobierno dice que el cannabis debe ser tratado como una medicina y por lo tanto sometido a un control directo en el que no hay cabida para cultivos fuera de la ley y su ojo vigilante. Al mismo tiempo se insiste en que el antiguo método -que permitía cultivar- tenía sólo una variedad de cannabis permitida (al menos de forma oficial ya que la compra de semillas de cannabis en Canadá requiere de un permiso del estado) y que eso desagradaba a algunos pacientes, abriendo el mercado en su sentido publicitario más salvaje a un enfoque en el que unas cuantas empresas privadas -compartiendo origen y capitales con las farmacéuticas- exploten la producción y venta regulada de cannabis en Canadá.


También se presenta como un avance en la seguridad de las personas, al evitar que los cultivadores legítimos por razones médicas sufran asaltos por parte de traficantes o de usuarios del mercado negro e inciden en el aspecto de la seguridad al afirmar que reducir el consumo eléctrico al eliminar los cultivos particulares, elimina al mismo tiempo riesgos de accidentes de origen eléctrico lo cual no es cierto: al enviar todo el cultivo de cannabis al mercado ilícito o regulado en empresas privadas, los cultivos de interior que existan tenderán a primar la seguridad de no ser descubiertos frente a la seguridad en el montaje de los cultivos y sus sistemas eléctricos. Obviamente donde no hay cultivo es casi imposible que se produzca un asalto para robarlo, pero implica volver a tratar a la población como incapaz de cuidarse por sí misma ni en algo tan simple como tener un cultivo de cannabis en tu casa, precisamente para no acudir al mercado negro.

El botín que las autoridades prevén en ese nuevo mercado es grande y puede alcanzar los 1'3 billones americanos de dólares (PASTAZA) en ventas para las empresas pero eso incluye una tajada fiscal importante para el estado. El asunto quedaría en principio con un precio final para el cannabis medicinal que puede multiplicar hasta por 5 el coste actual por gramo y que en ningún caso se espera que baje su precio. 

Ese hecho resulta una diferencia radical con el modelo regulador de Uruguay, ya que el coste fijado por el estado de 1 dólar por gramo de cannabis es desalentador para el narcotráfico y tendrá claros efectos sobre el mismo, pero el aumento del precio final del cannabis en los consumidores medicinales ocasionará un mercado negro que exista simplemente porque los precios del mercado legal resultan abusivos y usureros dejando margen para que otros actores intenten participar en el asunto. 

El mercado recreativo de cannabis sólo verá cómo aumentan los precios en consonancia con el entorno y a la vez impulsados por la demanda competitiva del nuevo grupo de compradores que surgirán de la población a la que fuerzan a abandonar sus cultivos y comprar su cannabis a unos grupos determinados y a precios más caros que los ya existentes. Los datos actuales dicen que es un 60% el número de consumidores legales de cannabis que cultivan su propio material, frente a un 40% que lo compra en dispensarios de marihuana medicinal: eso hace que el número de clientes que van a volcar por ley de un mercado -el del autocultivo- a otro totalmente distinto -el de la venta forzosa regulada al por menor- sea un apetitoso bocado para los tiburones de las empresas.


Y así todo...




De forma similar a otras grandes operaciones económicas, la empresas se han lanzado a por una localización que les interese para la producción masiva de cannabis y a la vez ha habido localidades que se han ofrecido a las empresas, como Kaspukasing en Ontario que, además de óptimas condiciones fiscales, les ofrece un “oportunamente apartado lugar” junto con “acceso potencial a fuentes de CO2 para aumentar la producción de cannabis”

La fiebre del cannabis y su dinero en maletines portados por señores de traje y corbata está llegando a localidades que antes no tenían mayores expectativas de trabajo, aunque no en todas es así. Otras por el contrario están reaccionando hostilmente al asunto, como es el caso de Delta en la Columbia Británica que han decidido que no quieren saber nada del asunto, sea medicinal o no, y han reaccionado prohibiendo de forma local -hasta donde les permite su grado de autonomía- la venta y producción de cannabis en sus dominios.

Otro problema que la modificación legal introduce es que los consumidores de cannabis se verán forzados a obtener una sola forma de presentación: cogollos de cannabis secos. Quedan prohibidas las tinturas y los preparados orales, de manera que las personas que quieran consumirlo así deberán elaborarlo ellos mismos, con los problemas que eso puede plantear a los pacientes de consumo médico y el daño causado al tejido económico del cannabis legal que ya incluía entre su oferta productos de esa categoría, al parecer con bastante éxito por aquellas latitudes. Los pacientes podrán tener en sus casas hasta 150 gramos de cogollos de cannabis o hasta 30 días de la dosis que tengan prescrita (la cantidad que resulte menor), lo cual invalida el argumento de que esta medida aumenta la seguridad eliminando los cultivos, ya que son los consumidores quienes pasan a ser nuevos blancos ya que serán el punto más sencillo de acceso no legal a la droga, y 150 gramos de cogollos de marihuana en el mercado negro canadiense pueden llegar a ser cerca de 3000 dólares, lo que hace de los consumidores un nuevo blanco, desde luego mucho más desprotegido que los cultivadores que ya están más acostumbrados a todo tipo de plagas incluidas las humanas.

En cuanto a los otros temas de salud relacionados con las drogas, Canadá tiene dos grandes áreas de trabajo. 

En primer lugar los jóvenes que usan drogas como la MDMA. No es que la MDMA resulte un grave problema de salud, como han llegado a recordar los científicos, sino que el estatus totalmente ilegal de la MDMA hacía de su adquisición una lotería en la que muchos vendedores sin escrúpulos se estaban metiendo. 

Eso llegó a su punto más álgido en Canadá cuando hace un par de años se contabilizó hasta una decena de muertes en jóvenes por PMA o PMMA (dos anfetaminas muy tóxicas) que están siendo vendidas como éxtasis

La desconexión que durante años ha generado la guerra contra las drogas entre los jóvenes que las usan y el discurso emitido por los gobiernos hacían especialmente difícil que el mensaje de alerta fuera creíble, hasta que hubo voces en la propia policía que propusieron una increíble novedad: una amnistía para la MDMA que sirviera para que los jóvenes dejaran de morir por tomar otra droga que ni siquiera era la que querían consumir.

Mejor tomar MDMA de forma segura
que la lotería del mercado negro.
¿es difícil de entender?


El otro gran área que la política de drogas en Canadá tiene que abordar de una forma racional es similar a la de su vecino de sur: la sobre-prescripción de opioides a la población. Las drogas siguen matando por sobredosis, pero desde hace tiempo las principales víctimas de esas sobredosis no son consumidores recreativos que caen por las condiciones del mercado negro sino personas sin otra vinculación a las drogas que el haber sufrido algún tipo de dolor o de proceso y el haber sido recetados con generosas dosis de potentes y adictivos opioides, siempre bajo la batuta de las grandes farmacéuticas que saben que los adictos son una fuente segura de dinero y con ellos ofreciéndoles la adicción sin estigma social y con bendición de un médico, que es el chamán aceptado de nuestro modelo de sociedad. Sin embargo, a esas dos grandes necesidades para la salud pública el gobierno no parece estar dispuesto a atenderlas ahora.

Canadá inicia de esta forma los cambios que afrontará en el nuevo paradigma del trato con las drogas y sus usuarios, y lo hace con un modelo que tiene la característica de ser fácilmente escalable para abarcar a toda la población cuando se decida que el cannabis recreativo en Canadá también tiene derecho a existir

Siendo esa su mayor ventaja, no podremos obviar que la futura ley en Canadá no está pensada para el beneficio del ciudadano sino creada para que sea un instrumento más en el recorte de derechos y en la sangría económica que el estado impone con su decisiones: una imposición de nuevas cargas económicas acompañada de la eliminación de un derecho del individuo. 

Una regulación que esconde una privatización de mercado y de derechos no puede ser buena para un ciudadano, que es sobradamente capaz de cultivar y cubrir sus propias necesidades, convertido por ley en rehén de los nuevos camellos legales de cannabis.

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Sólo me queda una cosa que añadir: no fumes marihuana, 
porque es ilegal igual que agredir a un policía nazional.







viernes, 6 de junio de 2014

Consejos para una policía cerril, una judicatura prostituida y un legislador tarado.



Al final así: 'Consejos para una policía cerril, una judicatura prostituida y un legislado tarado'.

Había pensado titularlo "cómo saltarse los controles de drogas de la policía" que vende mucho más, o trucos para no dar positivo en drogas e ir totalmente ciego sin que puedan multarte. O cómo tomar drogas hasta reventar y matar a otros con un coche sin que puedas ser imputado por dicho consumo. 
Pero yo conduzco, y no me gustaría un día toparme con un hijo de puta conduciendo mal, por la razón que sea (me da igual).

Fue una cuestión de tráfico, sin víctimas de ningún tipo (creo que un poco yo, pero tampoco tanto en vista de que no cobrarán NI UN DURO, NUNCA). La experiencia estuvo bien, fue divertida y de aquello vivido, con el tiempo pasado, me gustaría extraer algunas ideas, para la policía y para los que tenemos la desgracia de soportarla.

No se me enfaden ustedes, señores maderos y otros tipos de parásitos, pero es que dan tanto asco como las fuerzas de seguridad de la Santa Inquisición, y además no realizan un buen trabajo. Vamos con las razones.


Esta piruleta 
os pondrá la madera 
en la boca 
al haceros un drogotest.



Desde el día 9 de mayo, la legislación ha cambiado. En mi disputa con las fuerzas de inseguridad -a partir de ahora maderos, todos, para no liarnos- yo tengo la suerte de que puedo defenderme en un juicio (que pagaréis TODOS, maderos incluidos, con tasas que pagaréis TODOS, y con un resultado que, en cualquier caso, YO NO PAGARÉ) pero los que caigan o ya han caído después de esa fecha no tendrán ese derecho.

¿Por qué? Desde ese día, la ley considera que si tienes restos detectables de drogas en sus pruebas, es suficiente para inferir que estás incapacitado para conducir. Para muestra un botón: yo fui multado por dar positivo en cannabis (habiendo tomado VARIAS DROGAS MÁS que no aparecieron extrañamente en su test) en un nivel que correspondía a un porro fumado varias horas antes, como poco. Todos sabemos que el cannabis en el cuerpo dura hasta meses después del último consumo. ¿Todos? Nos queda la duda de la policía y los jueces (amén del hijo de la gran puta del legislador) porque están ayudando a mantener un normativa injusta. Digo que nos queda la duda por decir algo: sabemos que el nivel mental de un policía, por definición, no puede ser alto. El de un juez, se supone que algo más, pero tenemos sobrados ejemplos de cómo sus señorías le pegan duro a las drogas y salen a conducir en moto sin casco.



Yo di positivo. Pero no me realizaron una prueba de alcohol (mal hecho) y además me permitieron llevarme el coche en mi “peligroso estado alterado de conciencia”. No lo entendí, pero lo agradezco, porque es un buen indicio de mi estado a la hora de enfrentar el juicio: estaba bien para conducir señoría, pregúntele a los que me multaron por qué me dejaron irme con el coche... GRACIAS.

Yo lo tengo fácil para echarme unas buenas risas en los juzgados (cosa siempre recomendable, porque ya conocemos cómo va la justicia: aunque la mona se vista de seda, mona se queda) pero si, por ejemplo, hubiera salido un niño corriendo detrás de una pelota, aunque mi reacción hubiera sido la normal, si le hubiera atropellado estaría en la cárcel. Sí.
Cárcel.

El mismo tipo, con el mismo coche, y con las mismas drogas en el cuerpo estaría en la cárcel. A pesar de que en realidad no había nada que alterase la conducción, pero una mera razón bioquímica me hizo candidato a sus atenciones: mi cuerpo tenía THC. ¿En qué nivel es delito? ¿Será como el alcohol, no? Podrás tener un poco pero no haber fumado en el momento, no?

No. Da igual cuándo hayas fumado. Da igual -a nivel de test y sus resultados- que te vayas fumando una trompeta tras otra mientras conduces. Da igual. Porque con el porro de la noche anterior, tienes bastante para que te multen, o para que si tienes un mal percance... vayas PRESO.

Los que tienden a pensar que tanto la justicia como los maderos funcionan dentro de parámetros de lógica racional es que conocen poco a dichos actores. La justicia es una mala puta a la que han violado entre todos. Y sus chulos son los que mandan.
Montesquieu ha muerto y viva el vino!!

No, vino no. Que es delito!! Mientras no seas juez en España, ir bebido y conducir es delito. O juez o político o policía nacional a la fuga tras atropellar y matar a una ciclista delante de su marido al volver de fiesta.... hay varias cartas en el mazo que te permiten librarte de la cárcel (la carta-atómica se llama indulto). Pero cada uno juega con las que tiene.

La cosa es que tenemos al sistema legal pidiéndonos que no consumamos drogas, ya no al conducir, sino en el resto del tiempo, de nuestro tiempo, en el que es un derecho el consumir drogas. La pirueta esquizofrénico-legal, de que se permite el consumo de drogas pero no la tenencia, equivale a decir que podemos jugar al fútbol sin balón. Llevo décadas buscando el método para que las drogas aparezcan en mi casa sin haber pasado todo un proceso previo, y todavía no lo he logrado más que con algunas.... gracias Silk Road.

Personalmente entiendo que nadie debe coger un vehículo (ni una bici) si no está en estado como para conducir. Las veces que yo no he estado como para conducir han sido siempre por sueño: he tenido que pararme si iba solo, buscar un lugar donde no pusiera a nadie en peligro, y echarme un rato para no quedarme sopa. Si iba con otro conductor, le pasaba el coche y yo descansaba. En viajes largos descanso cada 90 minutos, y le tengo mucho mucho mucho miedo a la carretera.

No quiero gente drogada o borracha con un coche en la carretera y sería el primero en denunciar si lo veo. Sin complejo alguno.
Pero.... no me gusta la caza de brujas, no la apoyo y creo que hay que discutirla un poquito con datos, así que señores maderos tomen buena nota.

¿Qué drogas detectan los test de la policía en tráfico?
La policía a día de hoy sólo está capacitada para pillar unas pocas drogas, ni siquiera las más peligrosas. Y todas las drogas que la policía puede detectar y multar, pueden ser sustituidas por otras que aunque vayas totalmente ciego, no podrán multarte (por drogas).

Los drogotest de la policía a día de hoy buscan las siguientes drogas, que pueden ser sustituidas por otras:

  • Opiáceos: los test buscan una estructura común derivada de la morfina. Detectan -en teoría- la morfina (ejem), la heroína o el opio, la codeína y alguno más. ¿Qué no detectan? No detectan metadona (si alguien cree que eso no coloca que lo pruebe y corra a urgencias) como no detectan el fentanilo ni sus 100 variantes legales, butirfentanilo, china white, alfa-metil-fentanil, y así hasta el infinito. Las que la policía no detectan son las más potentes y mortales.Y si por casualidad les diera por intentar detectarlas, hay otros cientos de opioides que están esperando para reírse de ellos. Y ustedes, maderos, con un documento oficial de multa donde pone “opiacios”[sic]. A que es genial????

  • Benzodiacepinas: si usted toma un valium por el dolor de espalda, o un lexatin cuando está algo alterado o nervioso, o un trankimazin porque sufre ataques de ansiedad... usted tiene un problema previo y otro que le han regalado. Usted dará positivo en los controles de drogas. Ya sabemos que usted tal vez no sea un yonky como nosotros, pero se jode. La cosa es que la policía busca las benzos, que son fácilmente detectables (ejem), y si las encuentra... 6 puntos de carnet y 600 euros de multa como poco. Qué sustancias no detecta la policía que funcionen igual??? Pues los barbitúricos. La droga de la muerte para algunos y una herramienta útil para ciertos trastornos. Carmina Ordoñez era FAN. Puede ir usted torrao de barbitúricos hasta no saber si lo que pisa es el freno o la cabeza del policía, que por drogas no le multarán. Estupendo, no????

  • Cocaína: la reina de las drogas en nuestro país. Tenemos más cocaína que Colombia, y a veces dicen que mejor. En los sitios turísticos es común encontrar una interesante postal en la que se ve una playa, sangría y una montaña de cocaína, con la leyenda “Spain!! TONS OF COKE!!”. Somos los más mejores con esto del narcotráfico, pregúntenle a Feijóo. Si tomas cocaína das positivo, pero es más fácil dar positivo en cannabis que en cocaína, porque el cuerpo la metaboliza antes. Eso no quiere decir que no tengas efectos, porque tras horas fumando cocaína tienes de todo, pero aunque estés con los ojos como platos y limándote los dientes todavía, si han pasado un par de horas o poco más, ya no das positivo en cocaína. Pero como he dicho que hay otras que la pueden sustituir, ahí van. Todas las variantes sintéticas de la cocaína, con mayor o menor efecto anestésico, con mayor o menor bloqueo de la recaptación dopaminérgia, son indetectables para los maderos. Y en muchos casos, también para los laboratorios más potentes de análisis forense: no pueden encontrar lo que no saben buscar. Luce bien la cosa??? 

  • Anfetamina: el speed de toda la vida da positivo. El sulfato “cafeinado” de anfetamina racémica da positivo. La dextro-anfetamina (bendita) da positivo. Las viejas centraminas dan positivo. El test busca una estructura común a muchas drogas y pita si tienes alguna, pero... que pite no quiere decir que acierte. Los test dan muchos errores de reactividad cruzada. MUCHOS. MUCHÍSIMOS. De ese error, la policía se aprovecha para intentar imputar a la gente cuando tienen drogas NO PROHIBIDAS que dan positivo. En ese caso te marean un poco, pero la sustancia al no estar fiscalizada, no es motivo de sanción ni de delito. Es decir, que aparte de las 4 anfetaminas mal contadas que hay en la ley, tenéis todas las variantes legales que se venden en internet para poder burlar esta legislación estúpida y mal aplicada. Hay cientos y no las voy a enumerar. Añado que es mejor tomar una anfetamina (una dosis normal, como las de farmacia de hace unos años) para evitar el sueño en carretera que intentar conducir con somnolencia. De hecho, a nosotros no nos dejan conducir tras haber tomado una anfetamina (para estar despiertos si estamos cansados por cualquier razón) pero cuando el gobierno USA pone un cazabombardero en manos de unos pilotos, les da 15 miligramos de dextro-anfetamina en una 'Go Pill'. Pero ya sabemos todos que los pilotos de bombarderos son personas no humanas y a las que la anfetamina les hace bien, no a los demás.

  • Metanfetamina: se puede aplicar todo lo anterior con una cierta extensión más amplia. Este test busca aminas secundarias, como la meth o metanfetamina (ice) y la MDMA o éxtasis. Pero existen decenas de drogas que pueden sustituir a ambas. Drogas como la MDPV que es un estimulante peligroso y otras más potentes que no están prohibidas pasarían el test sin problema, y si no fuera así, tampoco ocurriría nada por no estar fiscalizadas. Otras de tipo entactógeno como la MDAI no las detectarían tampoco sus test, aunque tuvieras encima una sonrisa que el policía creyera que estás ligando con él. Son drogas legales y no pueden -aún- fiscalizar su uso. De fiscalizarlo, hay otras 200 esperando. Toda una noticia para ir tranquilos, a que sí????

  • Cannabis: y llegamos al error mayúsculo de la política de drogas. El cannabis. Una sustancia llena de usos razonables, que lejos de inducir violencia o descontrol, suele relajar a la persona. Aunque pretendan ahora hacer ver que hay más accidentes por el cannabis, es una falsedad de la policía y los medios. Ahora lo que hacen es buscar cannabis en niveles tan bajos que fumando un porro el día anterior des positivo. De esa forma, los accidentes que ocurran el día después de fumar, o incluso días después del último porro, podrán ser achacados al cannabis. Es así de triste y repugnante. Pero la respuesta química en este aspecto es aún peor. Si la mayoría de las drogas se pueden sustituir por otras con peligros similares, en el caso del cannabis no es así. Se pueden sustituir por cientos de drogas ultrapotentes que provocan desde fallos multiorgánicos a la muerte, psicosis, depresión, suicidio, disociación, des-realización y des-personalización entre otras diversiones. Drogas que matan FUMÁNDOLAS. La gente tiende a creer que los cannabinoides sintéticos tienen algo que ver con el cannabis, y no es así. Citando un pensamiento de tuiter: comprar cannabinoides sintéticos para evitar las sanciones por cannabis, es como comprar comida caducada porque es más barata. A lo mejor de primeras sales del apuro, pero con las sustancias tipo “spice” y similares (son drogas químicas aunque te vendan un trozo de materia vegetal, está espolvoreada en ella) el riesgo mayor no es la multa, ni la policía, ni la cárcel. El riesgo es la muerte por consumo. Y hay pocas drogas tan peligrosas como esa familia sintética. ¿¿Pretende la policía fomentar el consumo de cannabinoides sintéticos que no dan positivo en sus test??

  • Alcohol: el más buscado, la droga de las fiestas, las peleas, los asesinatos, los accidentes de tráfico, la violencia familiar, la droga por excelencia de las violaciones y un elixir para la abotargada mente de jueces y policías. El alcohol sí está regulado: puedes dar positivo pero sin pasarte. No está mal: yo estoy a favor de los controles de alcohol. Pero también se pueden violar: el éxtasis líquido o GHB es una sustancia -semifiscalizada porque tiene uso médico en España con el nombre de Xyrem- que viene a ser un alcohol en sus efectos. Además dicen que te pone muy cachondo. Pero también es fácil caer inconsciente si te pasas o si mezclas. Y como el GHB tenemos al GBL y a otras variantes, que no se detectan por rutina y que son tanto o más potentes que el alcohol. Y se venden por internet y hasta en algunos Sex-Shop.

Hasta aquí todas las drogas que buscan por rutina en un control. ¿Qué nos queda? Pues casi nada.

LSD. Mescalina. Psilocibina, todas las triptaminas enteógenas y decenas de feniletilaminas entenógenas o estimulantes que no detectan y que podemos comprar sin movernos de casa.
No parece recomendable conducir bajo el efecto de ninguna de estas drogas porque son lo que comúnmente se conoce como alucinógenos (aunque no lo sean) y porque es una forma un poco hija de puta de matarse: mátate tú solo, chaval. Es decir, que no mola pero se puede burlar...

Otro grupo de drogas que la policía no detecta: los tropanos. Todos los años tenemos la fiesta del estramonio en la tele, con mención especial para la desinformación de LaSecta TV, en la que algún genio coge estramonio u otra planta con compuestos similares y se prepara una sopa con ella, matándose o matando a otros. Estás drogas son alucinógenos en el sentido más puro de la palabra: no distinguirás si lo que ves es algo real o algo que tu mente crea, no sabrás dónde te encuentras aunque en tu sueño creas tener el control, y mientras tú crees estar partiendo pan para un bocadillo, puede estar serrando por la mitad a tu gato. No molan nada. Pero no dan positivo en sus controles.

Más drogas que no dan positivo: los NBOMEs. Son sustancias peligrosas, muy muy muy potentes, que han matado ya a varias personas. El problema es que a nuestro país llegarán como si fuera LSD: en forma de secantes. La LSD no tiene dosis letal, no existe una sobredosis mortal de LSD. Pero de cualquier NBOME existe y ya la han alcanzado otros antes que tú. Procurad no tomar drogas sin analizar este verano, y exigid a los festivales como el Arenal Sound y otros similares que instalen carpas de ONGs de reducción de riesgos y daños en el consumo de drogas, para evitar muertes que jodan festivales.

Tampoco sustancia como la ketamina o la MXE dan positivo, los disociativos no dan positivo en los test de la policía, ni el jarabe para la tos con DXM, que es otro disociativo en dosis altas y un vehículo común de excursión para muchos en sus inicios como psiconáutas. Es decir, la policía controla y mal un puñado de drogas, en beneficio de otras.

El mayor beneficiado de esa legislación será el grupo de los cannabinoides sintéticos, el más peligroso. La prensa “seria” está intentando vincular esas drogas con el cannabis con afirmaciones vergonzosas como que dichas drogas son derivados del cannabis (dejan ver su nivel a la hora de hablar) e incluso abogados bocazas por la red intentando sacar partido de ello. España tiene la peculiaridad de que, a pesar de ser los más mejores y los más primeros metiéndonos todo tipo de drogas, los cannabinoides sintéticos no han calado aquí. La razón? La marihuana. Tenemos cannabis de sobra, por nuestros cultivos y por el tráfico con Marruecos. Abastecemos incluso a media Holanda produciendo droga en España y vendiéndola para ese mercado. Hace poco visité una plantación con más de 10.000 plantas, de la que ni un gramo se venderá en España.

Pero nosotros, drogas no.
El cannabis es el nuevo objetivo de los medios, la policía (muñequitas comebolsas, según una amiga) y los jueces tarados que no distinguen la polla del brazo que hace la paja. Y no tardaremos en ver casos en los que los daños provocados por su acción son superiores a los que pretendían evitar: 'Causa causatis, causa causae'.

Maderos, toda acción conlleva una reacción. 
En este caso, perderemos todos.
Ni para proteger ni para servir: como perros al cuidado de sus amos y enemigos del ciudadano.

Planteaos si es lo que buscabais.



Y feliz fin de semana. :)
Symp.