No hace falta decir nada más.
--------------
El circo de las drogas en la ONU.
En el mes de marzo del 2014 se celebró
en la ciudad de Viena un encuentro internacional de los responsables
de drogas de cada país ante las Naciones Unidas, bajo el auspicio de
la 'Comisión sobre Drogas Narcóticas', conocida como CND2014. Dicha
comisión está enmarcada dentro del Consejo Económico y Social de
las Naciones Unidas y existe formalmente desde el año 1946,
encargándose de los asuntos relacionados con la prohibición de las
drogas narcóticas.
El jefe de la ONU tras una mala pastilla que se comió.
¿Sólo de las narcóticas? ¿Y qué pasa con las
estimulantes y las psiquedélicas, por nombrar otras? No se deje el
lector engañar por el nombre: controlan todas las drogas desde hace
décadas pero como no sabían como referirse a ellas, optaron por
bautizarlas así aunque en realidad narcóticas sólo sean una parte
de esas sustancias.
A esa reunión, de varios días y larga
agenda, España mandó un nutrido grupo de representantes oficiales
que -por la longitud del listado de asistentes- estaba a la altura de
países como USA, México o Rusia y muy por encima de lo enviado por
países como Holanda, India o Israel.
¡Y no es para menos! En
reuniones “así de importantes” se deciden cuestiones que nos
afectan gravemente a todos los ciudadanos en materia de drogas. ¿Y
quiénes son los que fueron a hablar por nosotros? Pues gente seria y
responsable, no seáis desconfiados. Para empezar, el primero de la
lista es Francisco de Asís Babín, un conocido de todos por su
inestimable trabajo al frente de nuestro tan hispano 'Plan Nacional
Sobre Drogas' o PNSD. Antiguo licenciado en medicina que ahora
trabaja defendiendo -en rango de Delegado del Gobierno- lo que el
Gobierno hace y deja de hacer en materia de drogas, como por otra
parte es su función ya que es nombrado desde el mismo con el método
de la clásica democracia digital: a dedo.
Paco Babín a punto de iniciar el vuelo.
¿No teníamos nada mejor que enviar?
No vayan a preocuparse todavía, que aún hay más. La segunda
persona mencionada en el listado oficial de asistentes (no es por
orden alfabético) es Carmen Buján Freire, una diplomática “de
carrera” que está especializada... en terrorismo.
¿Pero esto no
iba de drogas? Lo más curioso es que esta señora es la
representante permanente en Viena ante Naciones Unidas de nuestro
país. ¿Qué tendrá de raro? Pues lo extraño de su presencia es
que ella fue situada en dicho cargo -de alta importancia estratégica-
en un nombramiento del gobierno del presidente Zapatero en el año
2010. Han pasado unas elecciones y hay un gobierno de otro signo
desde hace varios años en el poder en España, pero eso no es
relevante porque no se ha cambiado a esa persona. La realidad no
esconde mucho truco: la política de drogas del PSOE y del PP es
igual y no reviste diferencias reales, mucho menos a nivel
internacional. Si el actual presidente Rajoy no ha cambiado a esa
persona es porque cumple la función que de ella esperan y parece ser
que es capaz de cumplirla igualmente para ambos partidos gobernantes.
No hay tampoco noticia alguna de que su puesto vaya a sufrir el menor
cambio, exactamente igual que la política de drogas en el país:
todo acorde y en sincronía. El resto de asistentes a dicha cumbre
son los políticos y sus asesores técnicos, en inteligencia,
exteriores y algún representante del área sanitaria y social, en un
vano intento de dar algo de vida y color a la infumable lista de “la
selección roja” en este asunto.
Estas personas han de decidir en la
reunión mundial de mayor nivel sobre drogas cómo va la política y
qué cosas habría que modificar. A la vista del fracaso estrepitoso
de la guerra contra las drogas que han cosechado en un siglo de
prohibición sería de esperar que hubiera rápidos cambios. Pero
rápido y política son dos términos antagónicos. Aun así había
muchos temas que tratar así que se organizó como un circo de muchas
pistas con distintos temas, en el que los actores no eran “personas”
sino países.
La pista del domador legal y la temible
fiera de la 'decriminalización'.
El enfoque punitivo sobre la gestión
de la producción y la distribución de drogas es un error ya
certificado globalmente, pero más terrible es el enfoque punitivo
sobre consumidores de drogas. En este aspecto, las lineas generales
de recomendación surgidas del CND2014 para el mundo son que “no
debemos tratar a los consumidores de drogas como desviados sino como
enfermos” y por lo tanto no debemos criminalizarles por ello -ya
que esto dispara las tasas de infección de SIDA y hepatitis- aunque
ven lógico que la represión se produzca en otras áreas como la
económica vía multas.
¿Esto qué quiere decir? Pues que la ONU nos
recomienda “avanzar” hasta la Ley Corcuera o de Seguridad
Ciudadana 1/1992, esa por la que nos multan cuando nos cachean indiscriminadamente y tenemos droga encima para nuestro propio
consumo.
Mandril sin estudios que hizo la Ley de Seguridad Ciudadana.
Sólo puede pasar en España y en el PSOE.
A nivel real para España las directrices surgidas de esa
pista no tienen valor alguno, ya que aquí el consumo de drogas es un
derecho del individuo y lo que se sanciona -en una esquizofrénica
pirueta legal- es la tenencia en lugar público, como la calle. Por
otra parte es interesante saber que España tiene más de 22 años de
adelanto con respecto a dichos consejos y que ¿para qué va a
cambiar nada, no?
Del autocultivo de cannabis y esas
otras opciones... ya tal.
Verde que te quiero verde.
Esa pista tiene sentido para muchos
países en que el consumo de drogas o la tenencia de las mismas puede
suponer cargos de tipo criminal y eso les ha hecho saturar sus
cárceles sobremanera. Los primeros pasos los dio Portugal en 2001
con una decriminalización que pasaba a multas las sanciones
criminales por drogas para consumo propio y en el año 2009 la
República Checa con el mismo paso, sin haber contado con ningún
organismo internacional para hacerlo: soberanía nacional se entendió
y no hubo ningún problema.
Con ese acercamiento -bastante antiguo
en realidad- al problema pues uno se evita tener que introducir a
simples consumidores en el sistema judicial y penal del país,
evitándose una carga que se ha demostrado que satura el sistema
hasta hacerlo inviable, aparte de ser una agresión contra las
personas usuarias de drogas que no hace sino agravar los posibles
problemas o crearlos si no existían (un proceso penal no es ninguna
broma, chicos, y os puede joder la vida) al hacer a la persona tener
que enfrentarse a requerimientos intromisorios que violan libertades
fundamentales.
Dicho de otra forma: tenemos las cárceles llenas!!
Estamos que lo tiramos!! ¿Qué hacemos con tanto preso porrero y el
gasto que nos suponen al estado? Pues soltarles y mandarles a la puta
calle.
Ese es el espíritu que impulsa -nada
de caridad ni piedades varias- lo que ahora se están llamando
“Política de Clemencia” para los delitos de drogas que no
implicasen violencia y daño a terceros. De mano de los increíbles
USA llega esta bofetada refrescante: tras haber creado hasta cárceles
privadas ahora deciden ser “clementes” y no joderle la vida a
esos fumetas y pastilleros que tienen presos sin haber dañado a
nadie (más que a ellos mismos en el peor de los casos).
Debemos recordar que en USA hay
personas cumpliendo cadenas perpetuas sin haber causado daño a
terceros por delitos de drogas. Así que en esta pista del circo
podremos ver como se torna el concepto de “usuario de drogas
vicioso” a “usuario de drogas enfermo que hay que tratar” y
realmente no sé cuál da más miedo, tras ver a Grecia en Europa y a
otros países por el mundo usando campos de internamiento con
usuarios de drogas, inmigrantes y seropositivos.
Nos llegará de oídas esta ola de
“clemencia por esos pobres diablos que han perdido su alma por
consumir drogas” y que saturan sus cárceles hasta hacerlas campos
de concentración y hacinamiento de humanos, pero en España no
tendrá ninguna repercusión ya que aquí hace décadas que el simple
consumo de drogas se paga con multas y no con la cárcel, aunque siga
siendo igualmente una descarada penalización sobre un derecho
individual. Aunque no debemos de perder la vista a países como
Ecuador que están implementando una valiente política que implica
reconocer a las “mulas” que transportan drogas con estatus de
víctimas en lugar de tratarles como criminales, en un decidido paso
a no repercutir los daños de la prohibición internacional de drogas
sobre su propia población sometida a la necesidad de sobrevivir en
mitad de un país de tránsito de las rutas de la cocaína.
La pista del funambulista sin red sobre
la pena de muerte.
Mientras unos países discutían lo de
no meter en la cárcel a la gente por consumir drogas y tratarlos
como enfermos -englobando hasta tratamientos forzosos en países de
nuestra esfera cultural como los USA- otros países se divertían
hablando de sus números en la guerra contra las drogas con sus
estadísticas de sentencias de muerte por tráfico e incluso simple
posesión de drogas.
Estos ya no usarán más drogas.
Eso deja claro que esta gente se lo toma en
serio: ni una broma con las drogas que son malas. Mejor ejecutados
como hace China y otros cuantos países de su influencia cultural en
Asia. Pero no son los únicos porque la furia de las aplicaciones
integristas de los asuntos morales convertidos en legislación, deja
decenas de cadáveres colgando de grúas, ahorcados en las plazas
públicas de las ciudades de Irán y otros países islámicos que no
tienen problemas en aplicar la pena de muerte con el añadido de la
exhibición pública, como en los mejores tiempos de la inquisición
española con la quema de brujas y herejes. Como penas menores,
muchos tienen la amputación de miembros -manos, orejas, nariz- del
criminal para ayudarle a reconvertir su vida en algo más provechoso
para toda la sociedad.
En esta pista del circo fue Suiza la
que -con el apoyo de otros países- tuvo un valiente intento de que
se reconociera por parte de los asistentes que la pena de muerte era
una política totalmente desproporcionada en asuntos por drogas y que
eso se incluyera en una declaración conjunta. Parece algo razonable
a los ojos de un Europeo, pero no parece ser igual en países que
aplican la pena de muerte por las más variadas razones. ¿Por qué
no a los que andan con drogas y sí a otros? La respuesta seguramente
sería que es atroz utilizar la pena de muerte como herramienta de
control, pero eso no suena bien a los oídos de China, Irán y otros
cuantos países de instintos similares que cómodamente bloquearon
con su derecho a veto que tal declaración conjunta saliera adelante.
¿Y qué dijo España ante algo así?
¿Lo sabe usted? Nosotros tampoco. España como otros cuantos países
no querían líos con la pena de muerte y menos con China, a quien
hace poco hemos molestado con la causa penal que se seguía en base a
la jurisdicción universal, así que optamos por mirar a otro lado.
Pena de muerte Marca España.
Total, otros muchos países “civilizados como USA” tienen la pena
de muerte entre sus herramientas y no somos tan críticos ¿verdad?
La pista del neolenguaje y la reducción
de riesgos.
En estos años de dura travesía del
desierto de la prohibición, en el que las únicas medidas realmente
eficaces se han dado a través de los programas de 'reducción de
riesgos' -en su versión inglesa 'Harm Reduction' o reducción de
daños- no son pocos los países que de una forma sincera se han
acercado a esa aproximación al asunto de las drogas y sus usuarios.
Para quien no conozca estos programas su principal característica es
el trato con el usuario de drogas sin juzgarle ni criminalizarle por
sus consumos y, en lugar de ello, ayudarle a reducir los daños y
riesgos derivados de ellos.
Abarcan el trato en lugares como las
'narcosalas' donde las personas consumen drogas con una cierta
supervisión de profesionales, los programas de análisis de drogas
que desarrollan algunas ONG y que son el primer punto de alarma ante
partidas adulteradas de forma peligrosa para la salud de sus
usuarios, llegando hasta la educación del usuario de drogas -y del
no usuario- para que puedan tomar decisiones informadas sobre el
consumo o abstinencia.
Entre otras muchas áreas enfocadas en
prevenir problemas -como la difusión del SIDA mediante el reparto de
jeringuillas nuevas a usuarios- algunas resultan especialmente
rentables: evitar un contagio de SIDA cuesta entre 100 y 1000
dólares. Si a alguien le parece caro que piense el coste de un año
de atención, pruebas y tratamientos en un seropositivo.
Sí señores, el SIDA / VIH sigue existiendo y matando gente.
Desde hace años los países más
avanzados saben de sobra que la reducción de riesgos es el enfoque
más efectivo, humano e inteligente del asunto de las drogas bajo la
prohibición, pero eso no ha impedido que varios de ellos
consiguieran bloquear que se mencionase en la declaración final a la
reducción de riesgos bajo ese nombre. Se puede hablar de ella pero
se ha de usar un eufemismo que es algo así como “medidas para
paliar el daño provocado por el consumo de drogas en la población”
según se expresa en las guías técnicas que la ONU tiene
publicadas.
Sí, queridos lectores, en eso se gastan la pasta; en
decirnos cómo debemos llamar a las cosas, como siempre por nuestro
bien. ¡Gracias ONU!
Todo circo tiene un payaso y una
próxima vez: UNGASS2016.
Al mando de todo este montaje está un
ruso, apéndice directo de Putin, llamado Yuri Fedotov. El personaje
es irrelevante en sí de no ser porque es quién refrenda la política
internacional de drogas. Y entre otras la rusa, que le niega
tratamiento a los adictos (no aceptan metadona ni buprenorfina legal)
en su país hasta forzarles a recurrir a venenos como el 'krokodil' o
que ha cerrado el paso a toda la metadona que recibían los adictos
en tratamiento en Crimea, tras la anexión rusa de hace semanas.
Aquí el payaso Yuri
explicando cómo manejar
las drogas en el caribe.
Yuri es el payaso triste que una vez
fue el payaso alegre. Si algo ha quedado claro en la reunión es que
el consenso sobre drogas a nivel internacional está hecho añicos si
es que alguna vez llegó a existir. Para enfrentar -de nuevo- la
situación con las drogas, tras probar a crear un mundo sin drogas y
ver que eso es imposible, varios presidentes en activo de países
miembro de la ONU han solicitado, hasta conseguirla, una Asamblea
General sobre Drogas en Sesión Extraordinaria que ya se conoce como
UNGASS2016 donde se revisará la política global de drogas, pero no
con simples enviados diplomáticos sino con los presidentes de cada
nación.
Esa será la reunión de jefes de tribu
-presidentes y mandatarios, perdón- más importante sobre drogas y
que se adelanta varios años con respecto a lo esperado debido a la
situación internacional. Lo mejor que ha salido del CND2014 han sido
los grupos que se han formado para preparar la agenda de UNGASS2016,
aunque haya habido episodios tan lamentables como el que vivió el
Representante de Uruguay en la Organización de Estados Americanos
cuando le dijeron que Uruguay y Paraguay eran lo mismo. No contenta
la persona con su inteligente comentario insistió en él hasta que
los representantes de Uruguay se levantaron y se fueron de la
reunión.
México -con 60.000 muertos en 6 años-
y otros países de América se desangran por el tráfico de drogas
que USA -y Europa- consume y paga en plomo y armas. Los países de
tránsito ponen los muertos a base de población civil en un
desequilibrado mercado que nadie es capaz de frenar y que necesita de
una sincera y honesta regulación que permita a los adultos decidir
libremente sobre el consumo o no de sustancias y hacerlo de forma
segura para ellos y para los demás.
El mercado existe y no
desaparecerá: dejar que lo controlen las mafias sería un nuevo
error fatal que todos pagaríamos de nuevo.
No será hasta el año 2016 cuando
podamos ver si el mundo está ya listo para dar el volantazo a la
criminal política de drogas seguida por la ONU al dictado de USA o
si, por el contrario, necesitaremos de otros cinco o diez años más
para acabar con una política que ha hecho a todos los seres humanos
las víctimas de las opciones morales de unos pocos. Lo que sí
sabemos es que no ocurrirá sin mucho trabajo por parte de los
activistas.
Canutos para la paz.
¿O alguien se cree que con este circo
montado se puede cambiar el espectáculo tan pronto?
Esperemos lo mejor y preparémonos para
lo peor; mientras tanto a seguir remando hasta UNGASS2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario