viernes, 25 de julio de 2008

Afrodisíacos, cocaína, sexo y algunos negocios turbios.

Voy a contar una historia que aún está a medias, pero que como contrapartida tiene la ventaja de ser aplicable a muchos casos similares, y la moraleja (aunque incompleta) es válida para dichos casos -cada día más habituales por esto de internet- y conviene que la tengan en mente aquellos aficionados a buscar panaceas por la red.



Hace unos días, en la lista de Energy Control, que es la ONG nacional que se preocupa (no la única, pero sí la más conocida) por que los que deciden consumir drogas, lo hagan de una forma que minimicen los daños que el consumo les pueda traer -lo que se llama Reducción de Riesgos, y que el gobierno, siempre interesado en la salud pública, no quiere practicar- uno de sus integrantes dio la noticia de una web que vendía un producto que se achacaba interesantes virtudes.

Dos cosas hay que mueven la red, el mundo y los mercados: sexo y drogas.
Armas también pero no es el caso, por suerte.

El nombre del producto está bien elegido, ya que es una síntesis de dichos dos motores aludiendo a una de las drogas con más mito en cuanto a sus poderes afrodisíacos: la cocaína.
Cocaína y sexo.

La red es el medio de comunicación más activo y global que existe, y hace tiempo que los camellos, de mayor o menor alcurnia, hicieron suya una parte de este mundo.
Comprar cocaína por internet, es algo que sin estar exento de riesgos, se puede encontrar en anuncios varios.
Desde luego no parece probable que, a excepción de los que menos contacto tienen con el mundo real, alguien vaya a ser tan poco inteligente de comprar cocaína por internet.

Además de las mencionadas drogas por internet, está el sexo -el rey de la baraja- en el que podemos encontrar desde mágicos ungüentos que te aseguran un pene 8 centímetros más largo en 4 semanas, aparatos de tortura que a base de estirarte el miembro te darán una pilila digna de poner en el museo de cera, y también productos de todo tipo que juran como con su uso (normalmente dirigido para varones, con pocas habilidades sociales y una autoestima algo deteriorada) las mujeres caerán rendidas a sus pies, ardientes y deseosas de ser satisfechas por la varonil presencia de aquel que se haya dado un perfume determinado, o las haya dado a probar alguna sustancia de dudosa procedencia (normalmente sin su consentimiento y haciendo gala de una total ausencia de ética, y con un claro comportamiento criminal).

La mayoría de las personas, saben de sobra que estos remedios mágicos, viagras de cuerno de unicornio, y hormonas para vacas en celo, no existen.
Pero hay un porcentaje, pequeño por suerte, que por su desesperación o por ingenuidad creen que alguna de esas materias les convertirán en aquello que no pueden ser por la vía de la normalidad.

Volviendo (aunque no me había ido) al producto en concreto, algunos de los curiosos en esto de las sustancias y el sexo, o sólo en las sustancias, nos fuimos a ver dicha página.
Y para sorpresa, decían que te enviaban una ćapsula gratis para que pudieras ver sus efectos (ya no lo hacen, ahora si quieres probarla o analizarla, pagas primero).
Ahí de cabeza nos lanzamos a pedirlas, con ganas de saber qué tenían.

En la página NO DICE QUÉ COÑOS CONTIENE DICHA CÁPSULA. Pero sí dice qué es lo que no tiene.
Según el vendedor, el producto no contiene anfetamina, ni cafeína ni BZP (una piperazina, droga legal con la que se adultera en ocasiones el MDMA).
Pero la publicidad dice que simula los efectos del éxtasis.A nivel físico dice que "acelera el pulso cardíaco", "aumenta la temperatura corporal", y "elimina el hambre".
Son esos tres aspectos los más peligrosos para algunas personas, cualquiera que tenga cualquier tipo de trastorno cardíaco (conocido o no), el aumento de la temperatura aumenta el riesgo de deshidratación y las posibilidades de un problema por golpe de calor, y la falta de percepción del hambre ayuda a completar el cuadro por el que se puede llegar a una situación nada saludable por falta de nutrientes.

Parecen los efectos de cualquier estimulante como podría ser la cocaína o la anfetamina, pero insisten en su legalidad.

Al pedir la cápsula de prueba, ya que se hace por correo, pregunte cuál era su composición.
La primera respuesta que me dieron fue esta:

"Cocasex es una droga potente, no la tomes si estas tomando cualquier otra medicación.
Cocasex es una droga de diseño, LEGAL, no hemos enontrado interacciones con otros productos, la hemos tomado con viagra, cialis, cocaina, marihuana... con resultados espectaculares."

¡¡Vaya!! Están vendiendo una droga de diseño y potente, y legal.
Y sería de esperar que tendrán un buen respaldo de estudios sobre las interacciones farmacológicas para asegurar que no aparecen interacciones con la cocaína, cannabis, y viagras varias.

Pensé que tal vez, por precaución mercantil, no querían revelar de qué droga de diseño se trataba... ¿pero es eso legal? ¿Se puede vender un producto que actúa como una droga, a nivel cerebral y del sistema nervioso central, negándose a dar información sobre el compuesto y la dosis que lleva?

Me sorprendían esas afirmaciones cuando en la web indicaban sin pudor esto:

"Como todas las drogas cerebrales, bloquea la reabsorción de ciertos neurotransmisores (particularmente dopamina), la acumulación resultante provoca sensaciones muy agradables..."

¿Drogas cerebrales? Esa forma de actuación, bloqueando la recaptación de la dopamina, es el mecanismo en el que se basa el efecto de la cocaína y la anfetamina.
¿Han encontrado la droga ideal? ¿Una droga con los efectos de la cocaína y sin riesgos?

¡¡Esto no puede ser, y yo aquí sin saberlo!!

Así que volví a preguntar, cuál era el compuesto, y cómo podían saber que no era ilegal.
La respuesta me dejó acojonado:

"No te puedo decir la formulación, porque sinceramente, no la sé.
Pruebala y seguramente por tu experiencia, me podrás decir lo que lleva."

¿Están vendiendo una droga de diseño, potente, legal, que funciona como la cocaína o el éxtasis... y no saben lo que es?
Me resulta difícil de creer. Aquí la cosa o apunta a que cocasex es un timo o a que es una imprudencia peligrosa para la salud.

Además, a mi me habían enviado una cápsula sin pedirme explicaciones, sin saber si era mayor o menor de edad. ¿Ética o marketing?

Hay una error ampliamente difundido en esta sociedad a la que se le niega la información correcta sobre las sustancias, y el acceso libre a las mismas.
Bajo el manto de la prohibición, que la mayoría de los ciudadanos de bien aceptan en manada como una forma de protegerles de sus propias decisiones, se ha llegado a establecer una relación que no coincide con la realidad: muchos piensan que aquello que es legal, no les puede matar. Y viceversa: aquello que está prohibido es por el bien de todos, ya que esas sustancias matan (neuronas y personas).

Nadie esperaría que hoy día, la cocaína que le compraría a un camello pudiera venir con una cierta certificación de su contenido. Pero como en el "caso cocasex", sí esperan que aquello que les venden de forma legal, esté analizado y de alguna forma certificado sobre la seguridad que supone tomarlo. Peligrosa premisa esa.

Como la respuesta que me dieron no me dejó satisfecho (parece imposible que te digan que llevan las cápsulas que te venden), insistí en el mismo tema y me dijeron esto:

"Cuando conoci la droga y sus efectos (cocasex)y lo unico que me interesaba saber (para comercializarla) si era legal y si se podia la formula (para fabricarla), se analizó en un laboratorio quimico y el mesaje fue, todos los componentes son legales la formula no se puede saber"

¿Qué clase de laboratorio químico (se supone de que análisis) no puede decir qué sustancia es la que analiza, pero al mismo tiempo afirmar que sus componentes son legales?
Tal vez como cuestión de mercado valga que te digan eso, pero antes de vender un producto que calificas como droga de diseño, estaría bien asegurarse de cuál es.
Yo imagino que los servicios de análisis del Instituto Nacional de Toxicología podrían con "cocasex" resolver el misterio de la droga que sin saber cuál es, se sabe que es legal.
Y de esa forma ofrecer seguridad a quien pretenda consumirla.

Y si no se vende como medicamento, sino como suplemento alimenticio, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, podría decirle a "cocasex" qué contienen las cápsulas que venden. De hecho, tendría que estar registrada si así fuera de acuerdo con la ley:
"El registro de empresas alimentarias es una obligación impuesta por el derecho español. Dicha página muestra un buscador para localizar empresas dedicadas a la fabricación y/o elaboración y/o transformación, envasado, distribución, almacenamiento e importación de productos alimenticios, de acuerdo con el Real Decreto 1712/1991"

Por fin, en la última comunicación recibí una respuesta, que venía a contradecir lo que ponía en la web y lo que se había dicho antes sobre "drogas cerebrales".
Esta fue:
"La formulación esta hecha con aminoacios esenciales y minerales, simulando MDMA (extasis)"

¿Con aminoácidos esenciales (los que están en los alimentos) y minerales, se puede simular MDMA?
¿No era una droga de diseño legal?
¿Antes no sabían que compuesto era, y ahora son aminoácidos y minerales?

¿Y el consejo que dan en la web de dicho productito, sobre que es preferible esnifarlo a consumirlo por vía oral? ¿Esnifar aminoácidos?

Hubo cuestiones que no me pudieron contestar, sobre si la supuesta droga de diseño convertida en aminoácido, tenía efectos sobre la MAO u otras defensas corporales ante los compuestos externos.
Al final, desde el lugar que nos debían informar sobre qué es lo que venden, lo único que hemos podido averiguar es que se puede pasar en horas de no saber qué es, de una droga de diseño legal, a un inofensivo e inútil aminoácido.

Pero a alguna conclusión se llegará. Hay ya algunas cápsulas a disposición de un laboratorio, con la esperanza de que ellos sí puedan desvelar el misterio de la droga que no era droga.
Mientras la web de "cocasex" sigue ofreciendo orgasmos escandalosos a precios escandalosos.

Moraleja:
Resulta muy sencillo hoy día hacer una web, en la que se incluyen unas fotos de unas señoritas de buen ver, mostrando sus nalgas, pezones e insinuantes tangas.
Acompañarla de la venta de un producto que no se dice cuál es, y bajo la suposición de que es legal, suponer de la misma forma que no es peligroso.

Estas panaceas para poner cachondas a mujeres, hombres con problemas de levantamiento, y conseguir polvos de los que dejan una sonrisa en la cara durante 24 horas, no suelen tener más de verdad que las ganas de que sea cierto.

De existir alguna sustancia que pudiera imitar a la MDMA o a la cocaína y se venda por internet, tendría las contraindicaciones y peligros de las que pretende imitar (u otros añadidos).
Y que no se tenga que comprar a escondidas, o que no estén (aún) prohibidas, no es señal de que sean seguras.

Haciendo honor a lo que sería un mínimo de responsabilidad a la hora de consumir cualquier sustancia, es recomendable que nunca se consuma nada que no se sepa con certeza qué es, y en qué dosis se va a tomar.

La información está para protegernos, no para ocultarla a favor de un negocio, y menos cuando el riesgo es la salud de las personas.

Y no, no existe ni la cachondina ni hay sustancia alguna que vaya a convertir a cualquiera en el dios Eros por acto de magia, o a golpe de tarjeta de crédito.

P.S: He tomado del foro de Energy Control el informe sobre los efectos que un usuario que ha probado esa cápsula ha enviado.
Es bastante explícito.
"Me meti una capsula, la parti en dos tiros y es insufrible, me lloraron los ojos y el dolor se me extendio hasta la punta de cada oreja ,que solo me habia ocurrido cuando hace años me meti efedrinas level por la nariz.

El efecto tarda un poco, no es como la coca o el speed, no es gran cosa pero esta claro que no son aminoacidos, coloca supongo que 2 o 3 pondran bien, no se si es un rc pero puede ser...

A mi no me gusto mucho, pa follar 100 drogas mejores, algo de gustirrinin pero lo dicho, este tio es un primo que no ha probado nada en su vida

Estimulante, las pupilas no se me dilataron casi nada, eso si mucho aumento de la temperatura corporal, no digo que a dosis mas alta produzca algún efecto tipo alucinogeno que puede ser, esta claro que no es un timo, pero a ese precio me da la risa

Regalado igual me la tomo pero prefiero gastarme la guita en otras cosas

Si para ti esos son polvos inolvidables..."

miércoles, 18 de junio de 2008

Ayahuasca. La poción patrimonio cultural de Brasil.

Antes de tirarme a la piscina, voy a frenar un poco y a recordarme a mi mismo que este lugar sigue teniendo la intención de servir de divulgación de conocimientos veraces sobre diversos temas, en especial aquellos que tienen que ver con manifestaciones de la conciencia humana y sus herramientas.

A veces olvido que mucha de la gente que llega aquí, llega buscando información bastante básica, y que si quiero que la utilidad de este lugar llegue a todos los que vienen, la información a veces debe de partir de lo más básico (cosa que se nos olvida cuando nos ponemos a comentar entre amigos más o menos conocedores de estos temas).

Así que esta vez, empezaré despacito, y haciéndome a la idea de que quien puede leer esto, no tiene porque saber nada de lo que yo pueda dar por supuesto. A ver que tal.

Ya el título de la entrada puede resultar algo extraño, desde el nombre de la ayahuasca a que una bebida sea "cultural". Espero que a nadie le queden dudas tras un poco de lectura.

¿Qué es la ayahuasca?

Pues la ayahuasca es una poción. Un cocimiento, una especie de infusión, una bebida preparada con plantas.
Esta poción es una bebida que produce importantes efectos en la psique humana, y también su consumo prolongado parece tener repercusiones físicas positivas en muchos casos.

La bebida o preparado, es originario de la cuenca del Amazonas, donde hace milenios se comenzó a utilizar por los habitantes de aquellos parajes, y donde hoy se sigue utilizando.

Sus efectos son los de un enteógeno (alucinógeno, coloquial pero incorrecto), que algunas personas toman, bien dentro de un marco ritual o de forma individual, con diversos fines que pueden abarcar desde la curación de una enfermedad a la generación de experiencias espirituales de alta intensidad.

Si bien durante siglos este preparado estuvo restringido a los pueblos amazónicos y a otros que podían conocer y disponer de las plantas necesarias (pues son al menos dos).

El nombre, ayahuasca, se traduce como soga o liana de los muertos o los espiritus, aludiendo tanto a la forma de una de las dos plantas -la liana trepadora Banisteriopsis Caapi- y al efecto psíquico de la experiencia (tal y como la entendían sus primeros usuarios).

El nombre es una metonimia en la que hay una relación todo-parte, ya que es la liana la que da el nombre final a la poción, pero no es la que tiene los efectos psíquicos propiamente dichos.
La liana, contiene alcaloides como la harmina o la harmalina, que son inhibidores de la enzima Mono-Amino-Oxidasa (IMAO's), encargada de desactivar ciertos compuestos químicos en nuestro cuerpo y regular el nivel de otros, como algunos de los neurotransmisores más comunes, con un grupo amino en su estructura química.
La liana aporta la llave que permite a otro compuesto, que no es activo por vía oral, desplegar sus efectos en la mente humana.

Este otro compuesto es la DMT o dimetiltriptamina, una sustancia que fue sintetizada allá por los años 30 y se creyó que no existía en el mundo vegetal hasta que se fue encontrando en cientos de especies de plantas y en algunos animales, incluido el ser humano.
Este compuesto se añade a la poción a través de alguna planta que lo contenga, como podría ser la chacruna -Psychotria Viridis- u otras según la disponibilidad de las mismas.

Si bien estos son los dos componentes básicos de la ayahuasca, no son excluyentes, y existen muchos otros vegetales con actividad psíquica que son agregados a la poción, aportando sus efectos a la experiencia.

El químico Jonathan Ott, considera que la ayahuasca, por su mecanismo de acción tan avanzado es uno de los mayores descubrimientos de los pueblos indígenas: encontrar una planta que logre, por inhibición de una enzima, hacer activa a otras que no lo son. Es desde luego impresionante un logro así en sociedades que aún hoy viven de forma similar a como vivían sus antepasados hace miles de años, y que acumula un saber farmacológico sorprendente, más teniendo en cuenta que el entorno es selvático y que existen miles y miles de especies vegetales.

Aclarado qué es la ayahuasca y cómo funciona -la complementación de dos plantas distintas- vamos a ver que pinta la cultura y Brasil en todo esto.
Al estar situada la fuente original de esta bebida en la cuenca amazónica, mayoritariamente perteneciente a Brasil, es este el país donde existe un mayor consumo de esta bebida enteógena.

En Brasil se han ido desarrollando grupos de tipo religioso, que han adoptado como sacramento la ayahuasca. Eso no ha planteado ningún problema, incluso al contrario, ya que tras 18 años de estudios el gobierno brasileño decidió levantar cualquier tipo de prohibición sobre el consumo de ayahuasca, en vista de los efectos beneficiosos para los miembros y usuarios de estas agrupaciones, como son el Santo Daimé, la Unión do Vegetal, Barquinha y algunas otras.

Algunas de ellas, son sociedades religiosas con una integración total en el espectro cotidiano del país, en las que sus ceremonias están abiertas a todos los miembros en los que se encuentran personas de todos los estratos y condición social. Otras, como la Unión do Vegetal, parecen tener un carácter algo más elitista y en ella se puede encontrar a practicantes que forman parte del gobierno del país.

La sustentación teológica de cada una de ellas es diferente, pero todas comparten ciertos valores de referencia, en especial aquellos a la cercanía, respeto y contacto con la naturaleza, y al crecimiento y mejora personal.

¿Y la cultura? Sin pensar que todo lo anterior no es ya una expresión y un rasgo cultural, el título hace alusión a la propuesta del Ministro de Cultura de Brasil, Gilberto Gil, de proponer al Instituto de Patrimonio Histórico y Artístico Nacional de Brasil la inclusión de la ayahuasca como patrimonio cultural del país, con las consecuencias que ello tendría.

Como cualquier otro bien cultural (que Brasil ha definido unos cuantos en los últimos años, que van desde ritmos musicales a expresiones de fiestas histórico-religiosas como el Cirio de Nazaré) es de imaginar que serán potenciadas las medidas de protección de ese patrimonio, estimulación de su conocimiento y arraigo como parte de la identidad común de un pueblo.

¿Qué relevancia tiene esto?
Mucha. Por primera vez en la historia, un país y su gobierno quiere reconocer un enteógeno y su consumo como señas de identidad cultural.
En un contexto mundial de guerra contra las drogas, aceptar a ese nivel que una droga que está en las listas de prohibición internacional (la DMT lo está), y que no es diferente a otras del mismo tipo, como podrían ser la LSD o los cactus con mescalina, es una patada en la barriga de una prohibición que hace tiempo dejó de buscar justificaciones racionales o científicas, para pasar a ser un "modus operandi" bajo el que se esconden los mas variopintos intereses.

Hay un gobierno que está enviando un mensaje con su acto: este enteógeno, no nos da problemas, nos ayuda, y es parte de nuestra cultura. Nos hace bien.

Fuera de Brasil, algunas de esas iglesias como el Santo Daimé han salido y tienen cierta presencia en otros países, entre ellos España, Reino Unido o USA.
De hecho el gobierno usano -el esquizoide creador de una guerra contra la libertad del individuo- tuvo que reconocer hace un par de año el derecho a los miembros de estas agrupaciones religiosas en su país, el derecho a acceder y consumir ayahuasca como sacramento de su manifestación religiosa, del mismo modo que lo hizo con el peyote y la mescalina para los miembros de las iglesias peyoteras de nativos americanos.

En otro contexto, el uso de la ayahuasca como enteógeno se ha expandido.
No sé si ese hecho responde a cuestiones de disponibilidad o a propiedades específicas, pero ha entrado en los círculos de investigación psicológica, como una herramienta de autoconocimiento, o como herramienta para tratar otras problemáticas que curiosamente incluyen el uso de drogas adictivas y destructivas en el mal uso que muchos les dan.

Hay en marcha interesantes investigaciones sobre la ayahuasca a varios niveles, desde el puramente farmacológico, al trabajo de campo con adictos. El primer estudio sobre sus propiedades farmacológicas y el consumo en contexto occidental lo llevo a cabo el farmacólogo Jordi Riba, y puede ser consultado en MAPS.
Otro de esos estudios relacionados con su consumo en contextos urbanos (como es el que se da en esas agrupaciones religiosas basadas en el uso de ayahuasca) lo publicó Manuel Villaescusa, psicólogo especializado en el uso de dicha poción, en el año 2006. Puede descargarse y leerse aquí.

Cabe recordar que si bien la ayahuasca, como otros enteógenos y drogas, pueden resultar de utilidad para ciertas personas en ciertos contextos, no quiere decir que sean una panacea.
Las experiencias que afectan de forma intensa al "yo" no son bien toleradas por todos y pueden ser peligrosas para algunas personas con ciertos desordenes mentales, para las que de momento no resulta aconsejable acceder a estas experiencias que les pueden causar más mal que bien.

Los grupos responsables que usan esta "medicina, sacramento, o simplemente enteógeno" suelen contar con filtros que evitan que accedan las personas a quien les puede dañar la experiencia. En nuestro contexto occidental, la figura que debe dirigir estas experiencias y guiarlas, así como prevenir que en ellas participen potenciales afectados, es la del psicólogo, psicoterapéuta o psiquiatra. Y no cualquiera, sino sólo aquel que haya tenido formación al respecto, lo que implica haber pasado la experiencia en muchas ocasiones.

Como todo lo que a veces rodea a lo exótico, lo que viene de lejos, las medicinas mágicas y los remedios secretos, hay quien hace un uso incorrecto de ellos y particularmente centrado en obtener dinero de esas sesiones.
Como con cualquier instrumento de gran potencia, lo que se puede esperar de su uso en manos de un imprudente, es un desastre peligroso.

A este panorama no ayuda la situación de prohibición que se mantiene sobre las sustancias psicoactivas, y que favorece el secretismo y el acceso de cualquiera siempre y cuando pueda pagar a algún autoproclamado chamán. Por mucho que impresione la palabra (chamán) a ciertas personas, los conocimientos de estos tienen su ámbito de aplicación en la cultura que los ha generado. La "magía", las fuerzas de la naturaleza que explican los fenómenos que perciben los integrantes de una tribu amazónica, y esos enfoques con una cierta carga romántica, no tienen demasiado lugar en la mente y construcción de la realidad de un occidental -y son totalmente válidos para el indígena-.

Seguro que la imagen de un psicólogo de corte analista clásico, con su diván, tumbando en él a un indio con la cara pintada, la carcasa con flechas y los adornos propios de su grupo, preguntándole sobre como se desarrolló su infancia, la relación con su padre y su madre o sus pulsiones sexuales, nos parecería a todos ridícula y risible. Con toda razón, eso le es ajeno.

De la misma forma deberíamos contemplar, la exportación de contextos que no son significativos para nuestras vivencias como occidentales, por muy bonitos que nos puedan parecer.

Haber dado el paso de aceptar un enteógeno como parte de la cultura de un país (no sólo de la cultura indígena) es un paso valiente, que de ser bien llevado e imitado con las correspondencias adecuadas, puede y ayudará a situar el acceso a las experiencias útiles con enteógenos en el marco del ser humano occidental en la búsqueda de su propia espiritualidad o autoconocimiento.

P.S: Esperemos que esta vez, Gilberto Gil tenga más éxito que cuando ha pedido la legalización del consumo de cannabis. Es de esperar que así sea.

domingo, 15 de junio de 2008

Síntesis casera de LSD! Adictos a internet en busca de cura.


La síntesis de LSD ha sido desde hace 50 años, motivo de búsqueda y aspiración de muchos.
Las razones para ello podían variar desde haber "sufrido" una iluminación reveladora con esa sustancia, y querer compartirla masivamente con toda la humanidad, al simple afán de lucro.







No voy a decir que sea la síntesis química más difícil de la historia. No lo es.
De hecho hay muchos medicamentos que requieren síntesis mucho más complejas, y en comparación puede resultar una nimiedad.
Pero de las drogas de uso común existentes en el mercado, es posiblemente la más difícil, la que requiere de un material más preciso y unas condiciones más estrictas, por lo frágil de la molécula y lo fácil que resulta que se dé un proceso de isomerización de la misma, convirtiendo la deseada sustancia en un hermano mellizo sin actividad.

No estaba vivo en 1970, pero imagino que en aquel entonces, la información estaba restringida a los círculos en los que era relevante. No porque se escondiera, sino porque no encontrabas en el kiosko o en la peluquería revistas sobre química orgánica.
Y aquellos que en un momento dado se planteaban realizar dicha síntesis, tenían previamente una formación que nada tiene que ver con la actual de muchos que se lo plantean.

Internet, que ha sido posiblemente la creación con más repercusiones sobre la conciencia global y la visión del mundo, de todo lo creado en el siglo XX, ha democratizado el acceso a esa información.
Es una suerte, ya que facilita que cualquier curiosidad o interés pueda encontrar ámbitos de desarrollo y de información en segundos. Si eres capaz de leer inglés y tienes unos criterios mínimos de seriedad para evaluar la información que cada página ofrece, puedes acceder a conocimientos que antes estaban limitados a minorías.

Pero internet también ha traído otros males, o mejor dicho, malos usos o usos poco inteligentes, en los que muchos creen que aquello que leen es tan real en una página web de cualquier bromista que en la de una revista especializada en síntesis de fármacos -siendo además harto improbable que lean la segunda opción en lugar de la primera-.

Demasiada información puede ser tan negativa como la ausencia de ella, si no se han desarrollado recursos para aprender a discernir lo útil de lo grotesco. Y siguiendo las pautas de una sociedad que se sostiene en el consumo como mecanismo de recompensa del cerebro global, hay quien trata de la misma forma lo que internet ofrece.

¿Internet suena a droga? 
¿Malos usos y buenos usos? 
¿Aséptica en sí misma?

No es de extrañar. Incluso dentro de poco se podrá estar oficialmente enfermo por culpa del mal uso de internet. En Marzo, Jerald Block, un psiquiatra estudioso de las nuevas tecnologías, ha propuesto oficialmente, a través del American Journal of Psychiatry, que se incluya la adicción a internet como enfermedad mental en el omnipresente y todopoderoso catálogo de enfermedades mentales conocido como DSM, en su próxima edición que sería la quinta.

La presenta de 3 tipos: juego excesivo, consumo de sexo virtual excesivo, y exceso de comunicación por email y mensajería.
Las 3 variantes tienen en común varios aspectos: un uso excesivo (ya, es de perogrullo) asociado a la perdida del sentido del tiempo y abandono de otras ocupaciones primarias; un síndrome de abstinencia con reacciones de agresividad, tensión y depresión si no se puede acceder al ordenador; tolerancia (sí...) definida como necesidad de mejores y más hardware y software, y más horas de uso; y por último repercusiones negativas en el plano social que incluyen discusiones, mentiras, bajo rendimiento, aislamiento social y cansancio en otras tareas.

Por supuesto que ésto es excepcionalmente bien recibido por una industria farmacéutica que apoya y crea nuevas necesidades (en este caso enfermedades) que se puedan tratar con nuevos fármacos creando "granjas" de consumidores de sus productos... todo sea por la salud!!

Sin haber sido aún incluida en el futuro DSM-V, ya se plantean sus tratamientos (farmacológicos) y se da la alarma sobre sus peligros.
Se habla desde 10 muertes por fallo cardio-pulmonar en Korea debido al exceso de uso del ordenador, a asesinatos por cuestiones relacionadas con los juegos en red.
El cálculo (goloso, muy goloso) es que el 80% de los enfermos, que precisamente son niños y jóvenes -los clientes menos accesibles de las farmacéuticas-, necesitarán medicación, y que alrededor del 25% requerirán hospitalización.

Retomando el hilo. En cuanto ésto esté puesto sobre papel, empezarán a surgir nuevos grupos más definidos de adictos, con características más concretas.
Adelantamos uno de ellos: los "chemical role players".
¿Quien no soñó alguna vez con ser un químico que mezclaba potingues en matraces y lograba una fórmula secreta y única? La ausencia de un Cheminova en la infancia de una mente preclara tiene peores consecuencias que la falta de un Scalextric.

Esa proyección la encontramos desde hace un tiempo repetida una y otra vez en diversos sitios de internet, de cualquier idioma.
Los hay que se empeñan en hacer metanfetamina, y deciden usar el método "no tengo ni idea de cómo, pero por mis cojones que tiene que salirme". Otros apuestan por la MDMA y creen que en cocina de casa, y preguntando qué tienen que mezclar en la olla, van a conseguir la síntesis.
Pero como decía al principio la LSD es la reina, por su dificultad, aunque a veces se lean cosas como "es que es lo más habitual que hacen los universitarios para sacarse un dinerito extra".

Por supuesto que hay químicos capaces de eso y de más, pero su formación y charlas en la red nada tienen que ver con las anteriormente mencionadas.

Pero para acabar con esa frustración, un desinteresado personaje ha conseguido la primera síntesis de LSD casera con materiales al alcance de cualquiera. No sólo eso: la ha explicado y la ha ilustrado con imágenes.

Este es el texto donde lo narra...

"He estado metido en un proyecto secreto que se me ha antojado largo y tedioso, con muchas dificultades que sólo mi titánica paciencia me ha ayudado a superar.
El resultado es una increíble producción de LSD en un nuevo formato que se explicará a continuación.
Me dispongo a colgarlo aquí, ya que últimamente hay tantos usuarios interesados en la síntesis de LSD de forma casera, y yo, al haberlo conseguido, quiero compartirlo con todos vosotros. Espero ser recordado como el sucesor de Hoffman.

Aquí tenéis las instrucciones:

Lo primero de todo, reunir un costoso y puntero equipo de laboratorio, que después de estudiar miles de catálogos, aconsejo adquirir en el Toys'R'us.

Este es el equipo que he comprado, por menos de 100€. Económico, sin duda:

1º y básico. Quimicefa: 
El gran laboratorio casero de química experimental.






2º El chuchelandia. Con él conseguiremos presentar el LSD en este nuevo soporte especial que he inventado.






3º Muuuucha cerveza marca Foster.

Son la base de nuestra síntesis de LSD....



4º. El supercinexín. Para iluminar nuestras reacciones químicas con distintos tipos de luz.
Importante tener al menos una película.



Muy bien, hasta aquí ya tenemos preparado el material. Ahora deberemos montar el laboratorio. En mi caso, lo monté en la mesa camilla del salón de la casa de mi abuela. Así, en esas frías tardes de invierno, mientras trabajabas calentito arropao junto al brasero, mi abuela se entretenía viendo la novela. Así de paso la hago compañía, para que se acuerde de mi cuando haga el testamento ;)

Primer paso.

Abre un par de botellines FOSTER's, uno para tí, y otro para llenar un tubo de ensayo. Es importante realizar este paso con las persianas cerradas, a oscuras. Mejor por la noche.
La única fuente de luz que se tiene que proyectar sobre el tuvo de ensayo es la de el supercinexín (cualquier película valdrá, aunque recomiendo "los pitufos" por sus vínculos con la psilocibina, que le dará un toque triptamínico al LSD).

A continuación calentaremos la cerveza en el mechero que trae el quimicefa durante 30 minutos, añadiendo cada 5 minutos, unas virutas de chocolate de colores.


Gracias a la acción de las virutas de chocolate y la alta temperatura, las moléculas de la cerveza FOSTER mutan en moléculas de Amida de ácido lisérgico, liberando un aroma de lavanda que perfumará el laboratorio, para deleite de tu abuela (si es que te acompaña).


Paso 2:

Ya que tenemos la amida del ácido lisérgico sintetizada...


EUREKA!!!!

Continuamos con el siguiente procedimiento.

A oscuras de nuevo, proyectamos el supercinexín sobre el líquido obtenido en el anterior paso, y procederemos con una extracción ácido base.
Los reactivos que trae el CHUCHELANDIA nos vienen de maravilla para este proceso.

Echaremos un par de sobres de gelatina sabor fresa en polvo (NUNCA SABOR COLA O EL PROCESO SE ECHARÁ A PERDER) en el tubo de ensayo, para cambiar la densidad del agua, y conseguir que la amida de ácido lisérgico se cristalice, quedando precipitada al fondo.
Vaciamos el tubo sobre un plato, como si de un flan se tratase, y cortamos una rebanada de la parte superior, en la que se encuentra toda la amida de ácido lisérgico.

Este paso es muy complicado, pues se requiere que haya un sepulcral silencio en el laboratorio. Es necesario, ya que bombardearemos la muestra con ondas sónicas, silbando la melodía de los "snorkel".
Si es necesario, echa a tu abuela de la habitación. Puedes descargar la canción de internet si no la conoces, pero es imprescindible que sea silbada. Si por el contrario, la reprodujeses mediante un altavoz, o la cantases, las moléculas se deteriorarían degradándose en un derivado del ácido lisérgico, que pese a no ser lo que buscamos, podríamos utilizar para inyectárselo a nuestras plantas de marihuana, y obtener la famosa "marihuana triposa".
La melodía de los "SNORKEL".



Si hemos conseguido silbar la melodía en la frecuencia y registro correcto, la gelatina, bombardeada por las ondas sonoras, se combinará con los cristales, dejando como resultado LSD puro en líquido.

Paso 3:

Al fín tenemos LSD puro! pero no estéis de enhorabuena aún. Pese a tratarse de un poco líquido, las dosis de LSD en este formato son desorbitadas, así que necesitamos presentarlas en un soporte adecuado que nos permita controlar la dosis. Cómo? Pues de nuevo, Chuchelandia tiene la solución:

Metemos los cristales en la "goomy machine" que nos trae el chuchelandia. Añadimos jarabe de sabores, un buen puñado de hebras de plátano. Se remueve y bate todo muy bien, y lo metemos al microondas a mínima potencia durante 2 minutos (mucho cuidado que no se caliente demasiado, o el LSD se degradará. Por suerte, las hebras de plátano protegen al LSD de este efecto, aparte de colocar, como todo buen fumador sabe).


El líquido espeso resultante, se verterá sobre moldes de fantasía (agradecimientos de nuevo al chuchelandia) y se dejará secar a oscuras durante 3 horas. Después podremos desmoldar, et VOILA! Nuestros tripis caseros listos para tomar ;) Cada gominola equivale a un blotter con doble gota! cuidadín!


Mirad todo lo que he obtenido en 2 tardes. Me voy a poner fino!
AVISO: que tu hermano pequeño no lo confunda con chuches de verdad.

Bueno, esto es todo. Espero que disfruten de vuestro propio LSD puro y casero, y que hagáis un uso responsable de él.

Un cordial saludo."

miércoles, 30 de abril de 2008

Muere Albert Hofmann

El químico suizo, padre de la LSD y de otros compuestos de muy diversa clase, como la psilocibina o la reserpina, ha fallecido ayer a la edad de 102 años en su casa, a las 9 de la mañana, víctima de un ataque al corazón.

La persona que con sus ojos y sus manos, abrió los ojos y las manos de muchas, muchísimas personas, y aún hoy día eso sigue siendo así, nos ha dejado... con una importante tarea por delante.

Tras sobrevivir a su esposa, a su hermano y a varios hijos, al final ha tomado el último viaje.
Y el mundo algún día tendrá que sentir la vergüenza de no haber reconocido la valía de semejante ser y sus aportaciones. Ya no el premio Nobel, lo que el brindó a la humanidad no tiene precio ni pago posible... excepto la gratitud de millones de personas.

Que cada cual le rinda su personal tributo, los que fueron agraciados por su hijo problemático.
Yo ya lo hago y ya lo haré. E intentaré recoger lo que los medios publiquen, y actualizar esta entrada.

De momento, copio unas letras de Rick Doblin, presidente de M.A.P.S.:

"Albert murió a las 9 de la mañana según la hora en Basilea de un infarto de miocardio, rápido y relativamente indoloro. Dos cuidadores estaban con él en ese momento. Las únicas personas a las que se les dijo eran las gentes de Burg, el pueblo donde residía, y Peter y los otros están sorprendidos de como la noticia de su muerte ha viajado tan rápidamente. Es la era de internet...

Albert había estado pensando de forma creciente en la muerte en estos últimos meses. Había dejado de salir de casa, donde decía que podía sentir el espíritu de Anita, su mujer, que murió el 20 de Diciembre del pasado año. No asistió al Foro Psiquedélico Mundial hace un mes, pero atendió a algunos visitantes en su casa. Hablamos por teléfono el día siguiente a la conferencia en Basilea y se sentía feliz y lleno. Había visto la renovación de la LSD en psicoterapia e investigación con sus propios ojos, como lo hizo Anita. Le dije que deseaba comentar los resultados del estudio con él dentro de un año y medio, y él se río y dijo que trataría de ayudar con la investigación donde quiera que estuviese, tanto desde este lado, como desde "el otro lado".

Ahora recae más sobre las generaciones jóvenes conseguir la transformación de la LSD en una medicina de uso legal, y más allá como herramienta para el crecimiento personal disponible para todos.

Rick"

GRACIAS DOCTOR HOFMANN!!

sábado, 5 de abril de 2008

El adrenocromo, adrenalina rosa. Droga vaporware.

Hace unos días, uno de los lectores mencionaba el adrenocromo en un comentario del anterior post, haciendo referencia a una escena de "Miedo y Asco en Las Vegas".
Es una buena película, divertida, dada a mostrar un lado un tanto irreal y grotesco de las situaciones y efectos producidos por las drogas (cuyos protagonistas consumen como lacasitos).

Esa película, vista por alguien que no sea un drogófilo, le servirá para pasar una buena tarde, pero en manos de cualquier buscador de sensaciones químicas puede tener dos efectos. Uno es que se ría, disfrute con las alusiones y comparaciones que se hacen, con la representación de las sensaciones inducidas por psicoactivos, y no mucho más. El otro es que además de todo eso, surja una curiosidad por poder probar todo lo que en la película se menciona... y entre todas las drogas, el surrealista adrenocromo.

La escena en sí es bastante buena, una hipérbole audiovisual que logra captar la atención y quedar en el recuerdo de todos los que han visto la película. El compuesto es mencionado en el libro original de Hunter S. Thompson, y se mantiene en su versión cinematográfica.
Y parece ser que Thompson cogió la idea de alguna de las referencias que en aquella época había a la sustancia, que se la consideraba una de las bases para la explicación bioquímica de la psicosis.

El origen de esa idea se encuentra en que en plena época de máximo interés por los enteógenos como psicotomiméticos (imitadores de psicosis) se comenzaron a estudiar moléculas que hasta entonces no habían sido mas que curiosidades, como la de la mescalina. El parecido de esta con la de la adrenalina, y el hecho de que algunos calificasen sus efectos como psicotomiméticos, se topó con otra causalidad que hicieron apuntar al adrenocromo como base para la hipótesis bioquímica de la psicosis.
Un ayudante de Hoffer y Osmond, los dos doctores que estudiaban los efectos de los enteógenos y buscaban la molécula clave, les comento que él había experimentado síntomas similares a los de la mescalina al usar grandes dosis de adrenalina para sus ataques de asma.

Ese comentario, más la información de que pacientes de emergencias durante la segunda guerra mundial habían experimentado alucinaciones con el uso de un viejo stock de adrenalina que se había vuelto de color rosa, les hizo buscar cuál podía ser el compuesto.

Y se decantaron por el resultado de la oxidación de la adrenalina: el adrenocromo.
Aparte del mítico viaje de Duke en la película, la única referencia a ciertos efectos alucinógenos viene del propio Osmond en una ocasión que se la inyectó.
Pero esos resultados no han podido ser replicados en ningún otro experimento similar, y de hecho, la hipótesis del adrenocromo como la molécula de la psicosis, fue abandonada con brevedad.

La leyenda continuó y se disparó con el estreno de la película en 1988. En ella se dice que el compuesto ha de ser extraído de un donante vivo que muere durante el proceso, y como el lugar de producción es la glándula suprarrenal, pues ha dado lugar a todo tipo de historias por parte de los drogófilos menos informados y más imaginativos, hasta situarla como hipótesis de la matanza de seres humanos en ritos satánicos, para colocarse con sus glándulas.

En el archivo de Erowid, sólo hay dos informes de su uso, en los que parece tener cierta actividad, pero en ningún caso alucinógena. Sus títulos dan buena cuenta de sus efectos: el primero se llama "Matando el mito" y el segundo, "El peor dolor de cabeza imaginable".

Es un poco el vaporware de las drogas. Vaporware es un término usado para referirse a productos de hardware o software informático, que sólo llegan a existir sobre el papel, como anuncio o como modo de atraer la curiosidad de los lectores e interesados hacia cierto sector o producto.
No llega a serlo, porque el adrenocromo existe. Y se vende.De hecho, esta entrada ha surgido porque me he topado con una fuente que vende adrenocromo de forma legal (esta sustancia nunca ha sido prohibida). Se vende (en diferentes webs) con el nombre de Adrenocromo Semicarbazona, una sal del mismo.
En algunos sitios se dice que esta sal no tiene efectos alucinógenos, pero sí su forma de base libre, lo cual carece de sentido una vez que es introducida en el cuerpo humano, pero parece una buena forma de explicar como es que se usa el adrenocromo tanto en pastillas como en inyección intramuscular para reducir el sangrado de ciertos tejidos, sin provocar esos míticos efectos.

Lo curioso del asunto, es que esto del vaporware funciona incluso en el mercado de las drogas. ¿Qué pinta en una web llena de psicoactivos (piperazinas) este compuesto?
Sólo parece tener sentido si se le otorga credibilidad al mito.

El compuesto es fácil de obtener, tanto desde la propia adrenalina como si se quiere producir mediante síntesis, pero no tiene relevancia más allá de la curiosidad de ser el "non-plus-ultra" de las drogas alteradoras de la conciencia en una película de droga-ficción.Para evitar derramamientos inútiles de sangre inocente, en busca de la gran experiencia, dejo un enlace a la web que amablemente lo incluye en su catálogo.
No matéis a nadie, podéis pagar con tarjeta que es menos engorroso.

http://labresearchsupply.com/



Aviso que desconozco la seriedad de semejante distribuidor, aunque todos los productos que maneja son aún legales en la mayoría de los países.
En cualquier caso, está ahí de forma anecdótica. Pero si alguien tiene interés de verdad en probar el adrenocromo (lo cuál no parece especialmente atractivo), no le costará mucho dar con el en la web como medicamento de uso clínico y sin especiales restricciones.







domingo, 30 de marzo de 2008

MDPV (más), pirovalerona y prolintano.

Iba a añadir una nota a la entrada anterior, sobre lo último que me ha comentado la persona que probó hace unos días la MDPV/MDPK (importante el aviso de ciertos efectos), pero mirando cosas sobre esta sustancia, me he encontrado con una curiosidad estructural, y aprovecho para poner las imágenes y el comentario.

Para empezar, lo que me ha dicho esta persona, es que tras probarla como comenté el otro día, la probó en una sola dosis de 15 miligramos por vía oral.

La dosis le pareció la mejor para esa vía, pero tras la estimulación agradable que notó durante un par de horas, la experiencia se volvió más incómoda, con mucha alteración de la presión sanguínea (10/17) y pulso (entre 100 y 120 en reposo).

Poca sensación eufórica que se desvaneció casi de golpe a las dos horas, mientras trabajaba (trabajo no físico) y pensamientos de preocupación al centrarse en la respuesta cardíaca que era molesta y muy notable, lo que provocaba ansiedad y le hizo tomar en dos ocasiones (a las 2:30 horas y a las 3:30 tras la toma de la MDPV) benzodiacepinas, primero 10 miligramos de diacepam (Valium) y luego otros 5 miligramos. Con esa ayuda para suavizar la ansiedad, los efectos le duraron unas 5 horas, y el mal humor el resto del día.

Su impresión final es que si no tuviera a mano ningún otro estimulante, lo usaría ocasionalmente pero con mucho cuidado, ya que la ansiedad induce a dosificarse de nuevo (me comenta lo mismo de otras dos personas sobre ansiedad y redosificación) y la recompensa a efectos psíquicos es decreciente y hasta dudosa tras la primera administración. Nada de efectos entactógenos ni psiquedélicos, más allá de una sensación de lucidez enturbiada por la paranoia posterior y la ansiedad.

"Existiendo anfetas y coca, la única ventaja que le veo a la MDPV es el precio, pero prefiero pagar y disfrutar, a llevarme sustos y pasarlo mal" me ha dicho, y opina que prefiere hasta la yohimbina antes que tener que salir de fiesta o trabajar con la MDPV, y que no cree que nadie la quiera usar teniendo acceso a otras drogas, si no es por curiosidad. Que aunque bajo su efecto la tendencia a repetir es clara, la experiencia en sí no da muchas ganas de repetirse.

Otra advertencia que me da, es que una de las personas que la ha probado (una dosis de 10 miligramos por vía oral) tomó cocaína unas 3 horas después, y tuvo una reacción con fuerte taquicardia (más de 150 pulsaciones por minuto) y sensación de ahogo, que le duró unos 40 minutos y despareció cuando ya había tomado dos Valium de 10 miligramos y se disponían a llevarle a un hospital por el estado nervioso que tenía. Éste es un hombre de 38 años, acostumbrado a los estimulantes, y de peso normal y sin problemas médicos.
Se pregunta si puede tener algún tipo de efecto de inhibición sobre la MAO.

MUCHO CUIDADO CON MEZCLAR LA MDPV CON OTROS ESTIMULANTES.

Si realmente no fue una reacción específica de esta persona, no parece que sea una sustancia que sea deseable que esté en la calle, con los patrones de policonsumo de la mayoría de la gente cuando va de fiesta. Y por lo relatado, la MDPV parece más una curiosidad para algunos, que algo que vaya a ocasionar su propia demanda.

El otro tema que comento, es sólo una curiosidad química, pero puede servir de orientación para curiosos.

La estructura de la MDPV:


La estructura de la pirovalerona:

La estructura del prolintano:



La primera es la sustancia de la que hablamos. La segunda, la pirovalerona es una sustancia ya controlada por la legislación, que se incluyó en los listados de sustancias controladas a la vez que la MDMA.
La MDPV es la versión "MD" de la pirovalerona, y ésta a su vez es la versión metil-ketona del prolintano.

Aunque la imagen esta colocada al revés, se puede ver como a la última (el prolintano) sólo le falta un carbono pegado al núcleo del anillo de benzeno y un oxígeno (con doble enlace) en la cadena que le une al otro anillo, para ser la pirovalerona.

La curiosidad del asunto, es que el prolintano es el compuesto "anfetamínico" que tenía el famoso Katovit -ya desaparecido de las farmacias- que se usaba para estudiar y que se consumía de forma masiva en época de exámenes. Si borramos partes de su estructura, tendríamos la anfetamina común. Pero en su caso, el grupo amino está protegido formando parte de un anillo heterocíclico saturado, llamado pirrolidina, lo que lo hace no atacable por las enzimas que degradan las aminas primarias, como la mono-amino-oxidasa (MAO).

La variedad de sustancias sintetizadas y "probadas" con unos u otros fines que tienen una estructura básica que parte de la MDPV es bastante amplia. No sería raro que en el futuro se fueran poniendo a disposición de los circuitos de los RC's algunas de ellas, sobre todo las más simples.
Aquí se pueden ver unas cuantas, casi 50 (y todas menos 4 ó 5 manteniendo el grupo "MD"):Estructuras químicas partiendo de la MDPV.


Y un último comentario que merece la pena como aviso para navegantes, es que le echen un vistazo al artículo que ha publicado "El País" en versión digital e impresa sobre la marihuana y las distintas dolencias en las que puede ser útil, y cuenta algunos de los casos conocidos de su uso y de su recomendación "bajo cuerda" por parte de algunos doctores a sus pacientes.

También se habla del "Sativex" desarrollado por GW Pharmaceuticals, el medicamento al que podría tener acceso Juan Manuel Rodríguez Gantes, el tetrapléjico que se enfrentó a las autoridades para poder cultivar cannabis para sus dolores neuropáticos, y del documento tipo "prospecto" que ha elaborado el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona, para que los pacientes que lo usen tengan unas indicaciones básicas.
Ese documento, en el que se apoya el uso terapéutico, se puede bajar aquí en formato PDF:
Prospecto de uso medicinal del Cannabis.

Y el artículo de "El País" es este: Marihuana con receta para vivir mejor.
Gracias a Carlos G. Wagner por el aviso sobre el artículo.

Espero que os guste y que el aviso de precaución con la MDPV sirva para evitar otros sustos.

Symposion.

martes, 25 de marzo de 2008

Primeros contactos con la MDPV (o MDPK)

Hace unos días y aprovechando las vacaciones, un buen amigo (y viejo, amigo) me hizo una llamada y una proposición: "¿Quieres probar la MDPV?"
No supe que decir en el momento, tenía mis dudas y no me lo había planteado, pero sí que me apeteció al menos echarle un vistazo, ya que se daba la oportunidad.

Habían comprado entre algunas personas una pequeña cantidad, y esta persona (llamémosle "J" para preservar su identidad, ya que así lo quiere) tenía un cuarto de gramo de la dichosa sustancia. Para ser exactos tenía 243 miligramos.




Pasó por mi casa, y trajo 11 pequeños viales de cristal. Diez de ellos tenían 10 miligramos correctamente pesados, y el restante, algo más de 140 miligramos de la sustancia.
El aspecto de la sustancia, era el de una sal con ligero brillo, cristalino y con un color entre crema y marrón muy claro. Me recordaba a algún "cristal" de MDMA que había visto hacía poco, pero el marrón era diferente. Tampoco se me da muy bien eso de definir colores, y aunque intenté sacarle unas fotos con el móvil, era demasiado poco como para verse y de cerca se volvía totalmente borroso.

A pesar de que tenía cierto brillo, la sustancia parecía húmeda, y J me confirmó ese aspecto: al pesar las cantidades en que había separado en los viales, le fue difícil porque se quedaba adherida a la espátula.

El vial con los 140 miligramos, lo abrió y me lo dio a oler. Yo debía tener la nariz poco receptiva, porque me costó sacarle algún olor. Podía ser por el incienso o por el tabaco, pero cuando conseguí olerlo, me pareció algo nada sencillo de describir: por un lado tenía un cierto olor a materia orgánica mezclada y por otro lado me recordaba a un zumo que había bebido hacía días y que estaba ácido y estropeado.
Mi descripción del olor, aunque pobre, es menos grotesca que la que hacía J.
Textualmente decía que a él le olía como "el olor de una vagina tras horas de sexo sin preservativo, pero sin la parte agradable". No es textual del todo, he cambiado algunas palabras pero sigue manteniendo el mismo contenido la frase.

No quedaba claro como podía ser tan oloroso, siendo una sal, ya que supuestamente era clorhidrato de metilenodioxipirovalerona, y al estar en forma de sal no debería oler tanto. Pero no era el olor de ningún solvente típico que pudiera hacer pensar que eran restos de una síntesis. Le pregunté si había hecho alguna prueba con algún reactivo, y me dijo que no y que no conocía referencias sobre ese compuesto y pruebas con reactivos, pero que uno de los que habían comprado la MDPV, la había probado hacía meses y la daba por buena (y es alguien como para concederle cierta credibilidad).

"Venga, ¿te animas o no?"
Y dije que no. No porque no me fiase de la calidad de la sustancia, que en ese aspecto no tenía muchas dudas viniendo de quien venía, sino porque me daba algo de reparo a nivel cardiovascular, aunque me aseguraba que no era más fuerte que la cocaína en ese aspecto.

Así que abrimos unas cervezas (y unos zumos) y J tomó por vía oral 5 miligramos.
Entre cigarros y conversaciones, mirando cosas por internet, a los 20 minutos dijo que notaba un poco de malestar en el estomago, algo de ardor y un poco de presión en las sienes, y algo de estimulación.
A los 35 minutos decía notar el efecto, pero a oleadas, no de forma estable. En ese momento dijo que le recordaba a alguna feniletilamina.Y a los 45 minutos, el efecto se lo podía notar yo. J estaba animado, hablando mucho más efusivamente, y tenía una ligera midriasis. No había señales de bruxismo con esa dosis, pero sí se quejó del calor de la habitación.
A la hora tenía los efectos plenos, y decía que la cerveza le sabía estupendamente. Comparaba en ese momento la MDPV con una anfetamina, en concreto con la metanfetamina. El efecto era estable y era el de una estimulación intensa, psicológica y fisiológica. El pulso se le había incrementado en un 30% y estaba alrededor de los 100 latidos por minuto.

A pesar de las pupilas dilatadas, no decía notar ningún efecto similar al de la MDMA o al de algún enteógeno. Decidió redosificarse con lo que quedaba en el vial, otros 5 miligramos, también por vía oral.
Yo opinaba que mejor esperar, pero donde hay patrón no manda marinero. A los 75 minutos de la primera toma, repitió con la misma cantidad.

La estimulación se hizo más intensa, y se vieron las primeras muestras de ansiedad, al tener demasiada "energía" y no saber que hacer con ella. La conversación se hizo más monólogo y exteriormente sí podía confundirse con la MDMA, más confidente, más "cercanía" pero sin la calma y ese efecto "tranquilizador" que a la vez lleva el éxtasis. Yo en algún momento pensé que tal vez estaba mal pesado y miré los viales, pero es imposible distinguir con seguridad en esos márgenes de miligramos.

A los 150 minutos de la primera toma, J se fue. Había llamado a una amiga e iba a verla.
Comentamos antes de que se fuera que tal vez era una buena ocasión para ver si eso tenía algo de "sextasis".

El resto de la historia lo cuento a partir de sus palabras y con su permiso.
Al parecer el estar en la calle, cuando bajó, se le hizo incómodo, y hasta que llegó a casa de esa amiga, caminó bastante rápido. No se encontraba a disgusto, sino demasiado acelerado y sin nada en que emplear la energía. Dice que lo que sí notó en ese trayecto fueron las ganas de ponerse una puntita y probarlo por la nariz, y que en eso sí tenía algo de parecido al "craving" de la cocaína. El efecto estimulante es más largo que el efecto euforizante, es una de las cosas que le han quedado claras, y que la tendencia a dosificarse de nuevo está ahí y se nota mucho.

Cuando llegó a la casa, invitó a su amiga, y ambos se pusieron una puntita, hecha con un vial entero, separándola en dos partes, una para cada uno (5 miligramos esnifados). Al ser la cantidad tan pequeña, no sabe muy bien si quedó en la naríz o quedó en la garganta, pero que el sabor que le bajaba era de un amargor desagradable.

Para la mujer, parece que resultó más que suficiente, mientras que a él, se le reducía la euforia y se le aumentaban los efectos secundarios, con el impulso de tomar más, aunque no lo hizo en ese momento.
Entraron en terreno sexual, y parece que eso alivió la situación un poco "al tener algo que hacer". No me dice que sintiera ninguna ventaja a nivel sexual, sino lo contrario: dificultad en la erección y en el orgasmo.

Tras ello, él volvió a esnifar 5 miligramos de la sustancia, haciendo un total de 20 miligramos a lo largo de 5 horas. La impresión que comenta de ese momento es la de sentir la estimulación en pocos minutos, pero ya casi exenta de euforia.

Aunque siguieron despiertos buena parte de la noche, el alcohol y los porros de hachís de aceptable calidad (lo que ahora llaman "pakistaní") se encargaron de frenar los efectos de la estimulación que quedaba, para finalmente tener que tomar una benzodiacepina para dormir.

Al parecer la mujer sí comentó una cierta percepción algo alterada con cierto parecido a la MDMA, pero no se sabe si tenía que ver con la MDPV por si misma o por la combinación de sustancias. Al día siguiente, la mujer no tenía resaca alguna, excepto molestias en la garganta causadas por el tabaco y los porros.

El protagonista del relato sí que destaca una molesta resaca, con el estomago revuelto, dolor de cabeza, y el humor bastante decaído, según él "hasta rozar lo agresivo por nimiedades", y mayor que la que tendría con otras sustancias más comunes como anfetamina o MDMA.La opinión que le queda de ese primer contacto con la sustancia, es que sí es "adictiva" en el sentido en que tiendes a repetir la toma de forma compulsiva cuando la parte más eufórica se desvanece -aunque en eso también puede tener que ver el patrón de consumo de cada persona con las drogas- pero que la forma ideal para él hubiera sido tomar una sola dosis de 10 o 15 miligramos por vía oral y no repetir.
Es según J, una droga que casa bien con el alcohol y el cannabis, pero con un bajón anímico muy duro.
El tema cardiovascular parece que también se nota afectado, si no de forma tan brusca como ocurre a veces con la cocaína, sí de forma más duradera, y cuando se esnifa hay momentos de fuertes acelerones en el ritmo cardíaco.

Hay que tener en cuenta que quien ha brindado los datos de este relato, es alguien con un cierto consumo frecuente de estimulantes, por lo que las sensaciones eufóricas, al ser dependientes de la liberación y cantidad de dopamina, pueden estar infravaloradas y ser más eufórica en personas sin un uso frecuente de este tipo de drogas.

Y esto es todo de momento. Desconozco sí ha vuelto a probarla aunque me dijo que me mantendría informado, pero que iba a probar su uso como estimulante en su trabajo con esas dosis de 10-15 mgs por vía oral. Espero que se anime y lo cuente él mismo aquí.

En cualquier caso, muchas gracias por la invitación y por toda la información que puedas brindar. Siempre es bien recibida.
Un abrazo, J.

sábado, 15 de marzo de 2008

Iglesia y Drogas. Entrevista a Xabier Pikaza


Hace un par de días, los medios de comunicación nos sorprendían con titulares sobre los "nuevos pecados" que consideraba la Iglesia Católica. Los tildaban de pecados sociales, y entre ellos incluían la destrucción del medio ambiente, el enriquecimiento salvaje a costa de otros, el narcotráfico y también el consumo de drogas. Pocos medios daban la noticia con un mínimo de rigor, y muchos, sobre todo medios sudamericanos usaban las declaraciones para apoyar el prohibicionismo cuestionado en algunos países.

Algunos medios abrían sus noticias con una frase, que mostraba el desconocimiento y el integrismo de Juan Pablo II (no sabrán que ya murió y con él su "reinado") que no pasa de ser su opinión, y no es una norma de ningún tipo para quien sea creyente y siga la doctrina católica: "La droga es un mal y al mal no se le hacen concesiones."

En un momento histórico en el que las discrepancias son mayores en el terreno de la política de drogas, que desde USA se dicta y parecen acatar el resto de países sin evaluar las premisas en que se basa, ese presunto "cierre de filas" entre la Iglesia y Estado frente a las drogas, parecía ser un cheque en blanco de apoyo, aumentando la confusión y fomentando la ignorancia frente a la tan necesitada ilustración farmacológica y modelos de consumo dentro del ámbito de la reducción de riesgos.


Este caballero, 
que parece que se ha caído en una marmita de MDMA, 
es Xabier Pikaza, 
un tipo que se pasa el día amando, y sin drogas.... ;) 


Hace tan sólo unas horas, y tras varios meses de debate, el ministro de Justicia argentino ha dado tramite a un proyecto de ley para despenalizar el consumo de drogas en aquel país, tras defender una política de reducción de riesgos ante la 51ª Reunión de la Asamblea de la ONU sobre Drogas y Narcotráfico, en Viena.
Este cambio de tendencia en materia de drogas y consumo, ha sido apoyado en dicha asamblea por los representantes de Gran Bretaña, Países Bajos, Suiza, Brasil, Ecuador, Bolivia y Uruguay, y es un cambio radical para los consumidores argentinos desde las leyes que sancionaron el consumo en 1989.

La droga, como ente inespecífico, sigue siendo un factor de primer orden mundial, que justifica desde políticas de ocupación encubiertas a violaciones continuas de los derechos individuales más básicos. Pero, ¿hasta dónde es real ese supuesto apoyo de la Iglesia Católica a esos actos que interfieren con la libertad de elección del ser humano?

Con excusa de estas declaraciones de un miembro del Vaticano, le pedí a Xabier Pikaza, escritor y teólogo, que nos explicase éstas y otras cuestiones. Si tuviera que definirle, hasta donde le conozco, diría que es una persona totalmente implicada en una doctrina y práctica del amor y la libertad del ser humano más allá de toda ideología. Libertad que en su caso, al aplicarla a su pensamiento y enseñanza, con todas sus consecuencias, le ha costado más de un quebradero de cabeza en el pasado. A cambio, la praxis de la coherencia, le permite dormir sin pelear con la almohada.

Sin estar de acuerdo con todas sus opiniones -valientes en muchas cosas y contenidas en otras-, y teniendo en cuenta que no es alguien familiarizado con la terminología de las drogas, aceptó responder a mis preguntas y como tal aquí las transcribo, sin modificar ni eliminar parte alguna.




- Drogoteca: Buenos días, Xabier. Tengo la costumbre de comenzar preguntando generalidades, porque quién no le conozca le interesará conocer algunas. Así que pónganos al día y preséntese.

- Xabier Pikaza: Me llamo Xabier Pikaza Ibarrondo (en mi DNI pone Jabier), nací el 12 de Junio de 1941 en Orozko, Vizcaya. De joven cursé estudios en Salamanca y Roma, y luego los amplié en Hamburgo y en Bonn (Alemania). Soy doctor por Teología por la Universidad Pontificia de Salamanca y de Filosofía por la Universidad de Santo Tomás, de Roma. Soy licenciado en Ciencias Bíblicas por la Instituto Bíblico de Roma. He sido durante treinta años, del 1973 al 2003, profesor de la Universidad Pontificia de Salamanca. Ese último año dejé la docencia y vivo dedicado a mis estudios, con Maria Isabel, mi mujer, en un pequeño pueblo de Burgos.

- Drogoteca: Las personas que le conozcan le tendrán vinculado a la Iglesia Católica, aunque algunos no sepan cuál es su relación actual y cuál ha sido. ¿Nos la explica?

- Xabier Pikaza: No creo que haya dado grandes cambios. Sigo siendo el que fui, en una línea algo distinta. He sido religioso mercedario y presbítero de la Iglesia Católica. Por razones personales e institucionales, dejé la Orden de la Merced y pedí la dispensa del presbiterado, o de otra forma dicho, abandoné el sacerdocio.
Me casé con María Isabel, dentro de la Iglesia Católica, de manera que soy un católico sin más. Por otra parte, no creo que la distinción de laicos y sacerdotes sea esencial en la Iglesia. Todos los cristianos formamos parte del llamado "pueblo de Dios", aunque podemos ejercer funciones distintas.


- Drogoteca: La excusa para esta entrevista ha sido la publicación el día 9 de Marzo de unas declaraciones de monseñor Gianfranco Girotti, director del penitenciario apostólico, en el periódico oficial del Vaticano.
¿Quién es este caballero que nos actualiza los pecados y habla de adaptarlos a la realidad social? ¿Qué es el penitenciario apostólico? ¿Qué valor tienen sus declaraciones? ¿Son vinculantes y normativas, son opiniones, son un término medio o un simple nuevo enfoque?

- Xabier Pikaza: No estoy muy puesto en estas cuestiones, pues mi especialidad es la Biblia y la experiencia básica de la fe cristiana, en relación con otras religiones. Pero puedo responder de un modo sencillo a lo que preguntas.
La Penitenciaría Apostólica es uno de los "dicasterios" o ministerios en los que está dividido el Gobierno del Vaticano. Es menos conocido que otros (como el de la Doctrina de la Fe o el los obispos), pero tiene una función que ha sido importante en el pasado: regular el desarrollo del Sacramento de la Penitencia, reservándose el derecho de perdonar algunos pecados especialmente graves, que los curas normales no podían perdonar, vinculados sobre todo con la vida y acción de los mismos sacerdotes, o levantar la excomunión de los que habían sido apartados de la comunión de la Iglesia.

En un sentido más extenso esta Penitenciaría se ocupa de organizar y "actualizar" el sacramento de la penitencia, actualmente muy en crisis, pues los católicos que se confiesan son ya una minoría. Pues bien, el presidente de este "ministerio" es el Penitenciario Mayor, el cardenal James Francis Stafford y su Regente o secretario es el Padre Gianfranco Girotti, O.F.M. Conv. (es decir, un franciscano). Ese Monseñor Girotti ha dirigido un curso especial para confesores en Roma, y al final de ese curso, de un modo "semi-oficial", ha concedido una entrevista a un periodista (Nicola Gori), ofreciéndole algunas impresiones sobre el curso y, especialmente, sobre los nuevos problemas del sacramento de la penitencia y de la visión de los pecados a comienzos del siglo XXI.
No se trata, por tanto, de una doctrina oficial, sino de una opinión oficiosa, aunque importante. Creo que la repercusión mediática ha sido excesiva, sacando a veces fuera de contexto algunas de las palabras de Girotti.


- Drogoteca: Muchos tal vez no lo recuerden o nunca hayan recibido formación religiosa y no conozcan la diferencia entre un pecado mortal y un pecado venial. Aunque posiblemente para un teólogo esa distinción sea demasiado simplona, ¿nos puede explicar brevemente la diferencia según lo que marca la doctrina católica? Estos "nuevos" pecados, ¿en que categoría normativa se supone que caerían?

- Xabier Pikaza: Pecados "mortales" son aquellos que implican la "muerte espiritual", es decir, que son merecedores de la "condena" más grave. Serían equivalentes a los "delitos mayores", que deberían ser castigados con una pena de muerte (según las leyes antiguas).

En sentido estricto, aunque los teólogos y moralistas han discutido sobre ello, los pecados mortales, que separan a un hombre o mujer de la vida de la Iglesia serían matar a otras personas (de un modo más o menos directos), apostatar (es decir, separarse de la misma Iglesia) y un tipo de adulterio en sentido estricto (romper la vida y unidad de otra familia).

Después se han añadido otros pecados mortales, relacionados con la injusticia (el robo) y, en ciertos ambientes, con unas relaciones sexuales desordenadas (que no estarían vinculadas al amor). Junto a esos pecados "mortales" se suele hablar de pecados graves (es decir, importantes) y también de pecados leves o veniales, que no llevan implícita una forma de muerte.


- Drogoteca: Tengo la sensación de que la mayoría de personas que pasan por esta página, no son muy católicas, así que a efectos prácticos les dará bastante igual pero... ¿Qué dice la doctrina oficial de la Iglesia Católica sobre la existencia del infierno? ¿Existe? ¿Es un lugar? ¿Un estado del alma?

- Xabier Pikaza: Sabes que hay opiniones distintas sobre el tema. El infierno está vinculado a la libertad del hombre, que puede "negarse" a ir con Dios. En ese sentido, el infierno es necesario, si se cree en la libertad. Un cielo a la fuerza no seria cielo, para hablar en términos sencillos.

Lo que pasa es que con cierta frecuencia se ha tomado el infierno como un castigo de Dios. La mayor parte de los teólogos piensan que esa visión del Dios que castiga a los malos es contraria al evangelio. Por otra parte, hay muchos teólogos y cristianos que piensan que el infierno es "posible", pero que Dios, por su misericordia, conseguirá de un modo u otro que todos los hombres se "salven"; es decir, que Dios les salvará.


- Drogoteca: Si la Iglesia Católica –y a partir de este momento me refiero a su jerarquía y a los miembros mas cercanos a la ortodoxia– trata de adaptar la condena de ciertos actos a la realidad social, como hablar del enriquecimiento a costa de los demás, de la destrucción del medio ambiente o incluso de la avanzada ingeniería genética... ¿No debería primero empezar por tomar contacto con la propia vida del pueblo? ¿No ha perdido, si es que alguna vez tuvo, como institución, el contacto con la realidad social y sus necesidades?

- Xabier Pikaza: Para Jesús no hay más que un pecado, que es no amar, es decir, no compartir la vida con los demás, en un sentido activo y receptivo. En esa línea, la única "lista" de pecados del Nuevo Testamento es aquella donde se habla de no dar de comer al hambriento, no dar de beber al sediento, no vestir al desnudo, no acoger al extranjero, no visitar al enfermo y no ayudar al encarcelado. Así lo dice el evangelio de Mateo, cap. 25. Pero después, al hacerse una institución social muy importante, la Iglesia se ha sentido obligada a ofrecer unas normas de conducta social más concreta y lo ha hecho a lo largo de sus primeros 2000 años, como educadora moral de occidente. La misma religión, que en principio es experiencia de gratuidad y de amor mutuo, se ha moralizado.

De todas maneras, la lista de pecados "capitales" (es decir, importantes, pero no necesariamente mortales), formulada por el papa de San Gregorio, en el siglo VI (soberbia, envidia, gula, lujuria, ira, avaricia y pereza) puede tener un sentido educativo, si se interpreta bien, pues ayuda a vivir de un modo mesurado. En ese momento, la Iglesia vivía aún inserta en la marcha de la sociedad, siendo en gran parte el motor de esa misma marcha.

Pero los últimos siglos la iglesia se ha separado un poco (o un mucho) de la dinámica social, aislándose de la dinámica del mundo, convirtiéndose en una especie de fortaleza cerrada por dentro, por miedo a los de fuera. En ese sentido, se puede decir que ella tiene que adaptarse, volviendo a “estar en la realidad”, como decía un gran cristiano, al que traté, antes que le asesinaran: Ignacio Ellacuría. La Iglesia debe estar en la realidad, pero no tiene por qué conocer los últimos avances en ecología y economía, en bioética y en medicina (ni en lo que implican los nuevos tranquilizantes o excitantes), por poner unos ejemplos significativos. Ella no es una institución científica, no sabe de todo. Pero puede y debe decir que las tecnologías deben ponerse al servicio de todos los hombres y mujeres y, en especial, de los más necesitados.

Yo creo que en esa línea quieren situarse las reflexiones que hacía Girotti sobre los nuevos "tipos" de pecados. Por eso, el problema no está en el deseo de orientar, desde una vertiente religiosa, a los que tienen deseos de ser orientados. El problema está en saber si esa orientación se ajusta al proyecto de Jesús y si responde a la problemática de nuestro tiempo y si sirve de educación en humanidad.


- Drogoteca: Hasta ahora, si no me equivoco, la postura oficial de la Iglesia no condenaba el consumo de ninguna sustancia, sino que condenaba cualquier hábito que supusiera una destrucción física o psíquica del individuo. ¿Es correcto? Dentro de esa perspectiva, el consumo de heroína o cocaína, por nombrar dos sustancias cuyo abuso puede provocar problemas de salud, no se diferenciaba esencialmente del consumo de tabaco, hamburguesas o pastelitos de chocolate. La consideración de "pecado" que podían recibir era dependiente de las consecuencias derivadas de su forma de uso sobre el sujeto. ¿Cambia en algo la posición con las declaraciones de Girotti?

- Xabier Pikaza: En principio, Girotti no dice qué pecados concretos se pueden cometer en el mundo de las drogas, sino que ofrece un principio general, diciendo que debe tener mucho cuidado porque “por medio de las drogas se debilita la psique y se oscurece la inteligencia, haciendo que muchos jóvenes queden fuera del ámbito eclesial” ("si indebolisce la psiche e si oscura l'intelligenza, lasciando molti giovani al di fuori del circuito ecclesiale"). El mal de las drogas estaría en que producen un "debilitamiento y oscurecimiento de la psique-inteligencia", que incapacita al ser humano (especialmente a los jóvenes) para vivir una existencia consciente y libre (como se supone que pide la iglesia). Pero hará falta ver si eso es cierto, y si es cierto en todas las ocasiones.

Por otra parte, Girotti no resuelve el problema más importante, el más sangrante, vinculado al mercado "ilegal" de drogas de diverso tipo que es, a mi juicio, el mayor de los pecados, con clanes mafiosos y con gran cantidad de muertos y miles de encarcelados en todo el mundo. En ese campo del “tráfico de drogas” se podría hablar de pecado capital. Al mover mucho dinero “ilegal”, el mercado de la droga se ha convertido en uno de los motivos más fuerte de violencia.

Volviendo al tema anterior. Por lo que toca al consumo de drogas, la postura de la Iglesia oficial ha sido siempre bastante "amplia" (ha sido más que tolerante). Por analogía, podemos recordar en este campo el tema del vino. En contra, por ejemplo, del Islam, la Iglesia no sólo ha permitido el consumo del vino, sino que lo ha estimulado y sacralizado como medio "sacramental" de comunión (de unión de personas que beben recordando a Jesús) y como signo de disponibilidad a la entrega de la vida a favor de los demás (sacrificio). El uso de un tipo estimulantes no sólo ha sido tolerado, sino que se podría decir que ha sido promovido en la Iglesia.

Pero hay unos principios “reguladores” en el uso de ese vino (y de todo vino):
(1) Los que consumen vino (o droga) deben conservar la libertad y la conciencia básica, para poder ser ellos mismo y amar a los demás.
(2) El uso del vino (y de la droga) debe ser comunitario, en el sentido extenso de la palabra: debe fomentar la comunicación y la solidaridad mutua.

Quiero insistir en esto. Con la tradición judía, Jesús y la Iglesia primitiva han conocido los riesgos del vino. A pesar de eso, han tomado la bebida como un signo “sacramental” de salvación, es decir, de transformación interior, de vinculación social (se trata de una copa compartida) y de esperanza utópica (por no decir “escatológica”, en lenguaje cristiano).

Los que beben juntos recordando a Jesús saben que habrá un “final bueno”. En su Última Cena, Jesús ha despedido a sus amigos con una copa de vino, prometiéndoles que la próxima la tomaría con ellos en el Reino de los cielos (Mc 14, 25). Eso significa que el vino compartido (vino-vino, no un sucedáneo, ni una gotita) es signo de algo más grande, de una esperanza superior de humanidad. Ese vino no se cierra en sí, no es vino de borrachera egoísta, sino que es una empresa y promesa común de salvación.

En esa línea, habría que distinguir en el uso y finalidad de los "estimulantes", precisando lo que pueden tener de ayuda humana (personal y social) y lo que puedan tener de riesgo de destrucción psíquico-intelectual (y social). Lo mismo en el caso del vino como en el de otras drogas. Éste es un tema que se debe seguir estudiando en el plano médico y económico, social y religioso. Pero, en sentido general, puedo decir que hay un tipo de estimulantes que pueden ayudar a vivir mejor, con más conciencia, con más compromiso (como se supone que es el vino, en la celebración cristiana de la eucaristía), y otros que pueden ser destructores de raíz, porque aíslan, porque crean una adicción que impide vivir en libertad, quizá porque son peligrosos para la salud…

Los críticos radicales dicen que la mayor parte de las drogas están en esa segunda línea, en la línea destructora: no abren la inteligencia, sino que la cierran; no crean libertad, sino que promueven adicción; no curan ni animan, sino que esclavizan, de manera que se puede hablar de una drogo-dependencia, de una esclavitud, de una destrucción causada por las drogas… Este riesgo hay que tenerlo muy en cuenta.

Por eso hay que distinguir los casos entre drogas y drogas (entre las que crean adicción y las que no), entre personas a las que “abren la conciencia y la capacidad de amor” y personas a las que destruyen. En esa línea, más que tema de pecado (y de policía) el consumo de drogas es un tema de educación, de discernimiento, de madurez y, sobre todo, de desarrollo personal y de vinculación social. Lo que importa es que los seres humanos puedan vivir en libertad, siendo felices, para amarse con más intensidad. Desde ese fondo debe valorarse el tema de las drogas.


- Drogoteca: Si la Iglesia no tiene por qué saber lo último sobre ecología, medicina o química... ¿con qué legitimidad se pronuncia sobre estos aspectos? Nunca he visto en un documento doctrinal de la Iglesia hacer una distinción entre sustancias, a pesar de que los usos, objetivos y riesgos de cada una varían como del día a la noche. ¿Quién definiría en este caso qué son y que no son "drogas" pecaminosas? Si ese papel queda relegado a los estados... ¿no se estaría produciendo un apoyo incondicional y nada crítico a los gobiernos que aplican la prohibición, a pesar de los males que se sabe que genera esta medida?

- Xabier Pikaza: La tarea de distinguir sustancias y sustancias no pertenece ni a la Iglesia ni al Estado, sino a los científicos y antropólogos, a los sociólogos y psicólogos. Éste es un tema de cultura general, es decir, universal. Pienso que la Iglesia no puede ni debe entrar en ese campo, atribuyéndose un derecho superior y haciendo por sí misma distinciones entre drogas y drogas, ni tampoco el Estado.

El Estado puede regular, en un sentido, el uso de drogas, según un consenso social, para defensa de las libertades básicas de los ciudadanos. Pero creo que no tiene autoridad para decir si son buenas o malas, ni debe prohibirlas, siempre que no destruyan el tejido social. La política actual, de tipo prohibitivo y policial (vinculada a los grandes negocios mafiosos del narcotráfico, con miles de encarcelados como consecuencia) no me parece la mejor. De todas formas, el problema es complejo y no es fácil ofrecer soluciones generales.

Por otra parte, tampoco la Iglesia tampoco puede ni debe entrar en distinciones sobre drogas, ni en prohibiciones, sino potenciar lo que está al servicio de la libertad humana, de la felicidad personal y de la solidaridad social. El interés de la Iglesia ha de estar en que las personas puedan ser capaces de vivir en libertad y de amar. El tema de “las drogas” se inscribe en un campo más extenso: en el campo de las cosas que pueden ayudar al ser humano o destruirle.

En un sentido la droga puede ser buena. Pero en otro sentido puede convertirse en adicción destructora, el riesgo mortal. En esa línea, la Iglesia podrá decir que lo que destruye al ser humano es malo, lo que le ayuda a vivir y ser feliz, compartiendo la vida con otros, en amor generoso, es bueno.

Para que esto sea posible (para que el consumo de estimulantes sea positivo) resulta necesaria una madurez humana, una buena educación personal (y social) y religiosa. Pienso que por el camino de las prohibiciones no se arregla casi nada (o nada), a no ser en casos extremos. Hay que promover una buena educación cultural y social, poniendo de relieve los problemas y valores de fondo del uso y abuso de las drogas, en el campo médico, psicológico y social.

Volviendo a mi campo, la Iglesia tiene que educar para la libertad radical y el amor, no por prohibiciones, sino por estímulos positivos. Ella tiene que mostrar que el valor más grande vida es precisamente el gozo de vivir y de compartir, frente al cansancio y desánimo que parece extenderse por muchas partes. Ella debe poner de relieve el valor positivo de la meditación, de la purificación mental, del gozo interior, etc.
En ese sentido, la Iglesia no puede empezar siendo enemiga de las drogas, pues lo que ella quiere ofrecer está en la línea de lo que pueden ofrecer algunas drogas (en línea de gozo, de plenitud interior, de mayor solidaridad).


- Drogoteca: Hace poco, un periodista a raíz de un libro publicado sobre la ebriedad, decía que el derecho a la ebriedad es un derecho humano fundamental, y que eran el estado y la Iglesia los que nos privaban de él. ¿Qué opina de ese derecho y de su represión institucional?En la línea de lo que ha comentado antes sobre el infierno, si éste es una consecuencia de la libertad del ser humano... ¿en que medida debería permitírsenos optar libremente?
¿Que valor puede tener una sociedad perpetuamente sobria por obligación legal y religiosa?

– Xabier Pikaza: No sé si la ebriedad es un derecho, ni me interesa saberlo. Lo que es un derecho es la libertad básica, libertad que se puede emplear para el bien y para el mal (en fórmula bíblica), libertad para escoger un camino de vida y para relacionarse con los demás. Dando un paso más, que yo sepa, pienso que la Iglesia no ha prohibido nunca emborracharse y, por lo menos, no ha dicho que la borrachera sea un pecado muy grave (incluido en la gula). Lo que es "pecado", según la convicción de la iglesia, es que un ser humano (hombre o mujer) renuncie voluntariamente a su libertad y su capacidad de pensamiento y de amor.

Para decirlo de un modo personal: Tú tienes el derecho (la libertad) de emborracharte o perder la conciencia normal. Pero, si te haces adicto al alcohol, si optas por una borrachera constante, que te impide ser persona libre, si niegas tu libertad y de alguna manera vas en contra de lo que has querido elegir tú mismo…cometes objetivamente (subjetivamente es otra cosa) un “pecado”. Mirado así, el pecado no está en la droga, sino en la pérdida voluntaria de humanidad (de libertad). No es un pecado para que después te castiguen (para que Dios te mande al infierno), sino un pecado que lleva en sí mismo el castigo, que es la destrucción personal. Uno es libre para elegir y, en concreto para elegir la droga, pero si elige un tipo de drogas y/o de usos puede destruirse.

Creo que el hombre ha de ser libre, incluso para decidir no ser libre (estar siempre emborrachado) o para matarse. En esa línea, el suicidio es un derecho del que no se le puede privar a nadie. Otra cosa es que sea positivo el suicidarse. En ese campo, la Iglesia supone que si un hombre "decide suicidarse" está destruyendo su vida, que es un don que ha recibido de otros, una vida que, en último término, no es solamente suya (sino don de Dios). Así se puede decir que un suicidio totalmente consciente iría en contra del "regalo de la vida" (sería un pecado). Pues bien, a pesar de ello, creo que a nadie, ni a un preso, se le puede quitar el derecho a suicidarse. Lo que hay que hacer es educar para el amor y la conciencia de la libertad, educar para vivir y no suicidarse, educar para la madurez y el gozo.

Pasando al último tema, una sociedad perpetuamente sobria por obligación legal y religiosa me parece una sociedad castrada. Creo, además, que la prohibición sería contraproducente, como en el caso de la Ley Seca, de ciertos estados de USA hace casi un siglo. De todas maneras, el tema es complejo y habría que estudiarlo desde lo que ha sucedido y está sucediendo en diversas culturas, como la musulmana, donde el uso de alcohol está prohibido, mientras la sociedad es mucho más tolerante en el campo de las drogas "blandas".


- Drogoteca: Sabrá que los vinos de la antigüedad, que algunas crónicas dicen que debían ser disueltos en hasta 20 partes de agua para evitar su peligro, contenían drogas de plantas mucho más potentes como vehículo de embriaguez que el alcohol. Pero aunque esto no hubiera sido así, ¿no le parece significativo que el primer milagro recogido en la Biblia que realiza Jesús de Nazareth, lo hace a petición de su madre y es para convertir agua en vino, y permitir así que una fiesta de bodas continúe tomando un psicoactivo?

- Xabier Pikaza: Ya he respondido antes. Vino y drogas han tenido una conexión profunda con la religión que permitido, regulado y "sacralizado" su uso. Los antiguos han sabido que vino y drogas ofrecían unos valores positivos, pero sabían también que pueden convertirse en fuerzas de destrucción. Como se ha dicho desde antiguo, “corruptio optimi pessima" (la corrupción de aquello que es lo mejor, se convierte en lo peor). La droga tiene unos aspectos buenos, pero puede convertirse en lo más destructivo.

En ese sentido, gran parte de los pueblos antiguos han regulado algún tipo de droga o vino, y lo han hecho básicamente en un plano de educación o "institucionalización" religiosa (o cultural). En esa línea ha habido iniciaciones, aprendizajes, acompañamientos, etc. Además, las drogas eran más “naturales”, no tenían el refinamiento y fuerza de algunas de las de la actualidad. Pues bien, ese control o, mejor dicho, ese acompañamiento cultural/religioso de la droga ha desaparecido en gran parte en nuestro mundo moderno.

El peligro de nuestra cultura es que corre el riesgo de dejar a los hombres y mujeres (especialmente a los adolescentes) en manos del riesgo del vino y la droga, sin ninguna iniciación, ni acompañamiento. La droga queda así en manos de la jungla de los deseos y apetencias de los particulares, de manera que los jóvenes pueden beber y drogarse sin iniciaciones, sin controles culturales, rompiendo las medidas. De esa manera, muchos corren el riesgo de volverse adictos o, mejor dicho, dependientes de la droga y del vino hasta extremos de esclavitud y de muerte.

Lo que es malo no es la droga, sino la esclavitud que imponen cierto tipo de drogas, en un mundo condenado a la pura lucha por la supervivencia. De esa forma, vino y droga pierden su función básica, su valor humanizador, y corren el riesgo de volverse destructoras. Por eso, hace falta una nueva iniciación, una nueva formación cultural e incluso religiosa, en este campo.



Xabier Pikaza con "El Chino", 
conocido delincuente charro. ;)



- Drogoteca: Tengo la impresión de que hay una gran distancia entre la praxis y magisterio de la iglesia y la realidad. Usted parece centrarse en la experiencia del amor en todas sus facetas (mucho más cercano al mensaje de Jesús), y también entender que hasta donde le correspondería, la Iglesia debería formar y guiar a aquellos católicos que buscasen la experiencia mística. ¿Dónde se encuentra en la Iglesia esa educación para la experiencia mística? Y hablando de educación, ¿cree que la educación obligatoria en la escuela debe ser laica o debe llevar aparejados valores propios de una religión en concreto?

- Xabier Pikaza: Son demasiadas preguntas para responder brevemente. De un modo telegráfico, te diré que la iglesia debe educar en su mismo espacio vital, es decir, en el ámbito de las comunidades cristianas, sin imponer sobre el Estado (sobre todos) un tipo de enseñanza. Pero la Iglesia no es una institución privada, sino pública. Por eso, ella puede promover espacios públicos de iniciación, sin imponerlos por ley, ni por obligación de Estado.

La escuela es un reflejo de la sociedad y así debe expresar lo que la sociedad quiera, por consenso. Por eso, creo que el Estado puede regular, pero no imponer un tipo de orientación en las escuelas. Por otra parte, el hecho de que las escuelas públicas estatales sean (y deban ser) “laicas” no quiere decir que sean antirreligiosas, ni mucho menos. Las escuelas públicas deben ser lugares abiertos para la educación en diálogo, de manera que en ellas puedan encontrarse y fecundarse las diversas formas de entender la realidad.

No se trata de “ocultar” en la escuela el tema religioso, sino todo lo contrario. Se trata de que la religión entre precisamente en la escuela, donde han de entrar los temas principales de la vida humana, pero no de forma impositiva, sino a través del diálogo y del estudio conjunto. Si dejas la religión fuera de la escuela (de la ilustración, del diálogo) corres el riesgo de crear fanáticos. Entre los aspectos de una buena educación para la humanidad y para el diálogo debería estar en aprendizaje vinculado a la maduración humana. En este plano debería entrar el estudio de las religiones, pero no de un modo confesional, sino de conocimiento y de diálogo en libertad.


- Drogoteca: Le veo vincular el uso de drogas a un contexto, no sólo cultural y por lo tanto variable y redefinido en cada momento, sino también a un contexto sacralizado.
Comenzando con la destrucción del templo de Eleusis y erradicando ese culto, no tengo la sensación de que a la Iglesia le interese o aliente el uso de ciertas drogas, que además de no presentar los peligros de adicción y destrucción psico-física de otras sustancias, su valor radica en la revelación de la experiencia "mística" (independientemente de la orientación religiosa), como son los enteógenos. Drogas como la LSD, los hongos psilocibios, o los cactus con mescalina, producen en un contexto adecuado una serie de revelaciones personales, y no necesitadas de interpretes, de la experiencia divina. ¿Cree que hay cabida en ese contexto para una Iglesia que se erige en poseedora e interprete de la única verdad religiosa?

- Xabier Pikaza: No quiero entrar en este tema de las drogas como medios de experiencia mística, pues ello exigiría un tratamiento mucho más amplio y detallado. Sí, como tú dices, parece que la Iglesia ha destruido algunos lugares y espacio de experiencia “mística” por así decirlo. Pero eso era otro tiempo. En este momento, volviendo a su primera inspiración en Jesús, creo que la Iglesia no puede ni quiere (ni debe) destruir nada, sino ofrecer una experiencia de encuentro con Dios, en clave de fidelidad a los otros y de felicidad. En ese sentido, la Iglesia tiene que ser un espacio de experiencia de felicidad.

La misma Iglesia en cuanto asamblea de creyentes que es, puede valerse de ciertos estimulantes como el vino, pero siempre en la línea de una ampliación de la experiencia (es decir, de la conciencia), en línea simbólica, y de una mayor de fidelidad a los demás. En este campo nos queda mucho por pensar y por hacer. Por eso tendremos que seguir profundizando y dialogando. En principio, no deben condenarse las drogas como tales, pero los mayores místicos han dicho que las experiencias más hondas del misterio se despliegan sin necesidad de estimulantes externos; y han añadido también que esas experiencias están vinculadas no con la destrucción de la persona, sino con su maduración y su capacitación para amar a los demás. Por ahí debería ir la Iglesia, ofreciendo experiencias de liberación para el amor.


- Drogoteca: Para algunos pensadores de distintas áreas, la experiencia religiosa e incluso la aparición de la conciencia humana está directamente provocada por los efectos de ciertos vegetales y hongos. Incluso se postula en algunos casos que el "Árbol de la vida" o el "Árbol del bien y el mal" que se nombra en el Génesis esconde una representación de ciertas fuentes vegetales que producían esa experiencia, y otorgaban un conocimiento superior de la realidad. ¿Lo cree posible?

- Xabier Pikaza: Seré breve. Esa pregunta sería para otra entrevista, pues exigiría muchos distingos. En principio, no sé responder, aunque pienso que el árbol del bien y del mal, no es la droga como tal, sino quizá, la libertad o el deseo de disponer del juicio supremo sobre la realidad.

Por otra parte, como dices, ciertas drogas han podido influir en los principios de la humanidad. Pero creo que el surgimiento de la conciencia es algo más radical, un tipo de mutación total en el proceso de la vida. Creo que en esa mutación hay como un corte: el ser humano se descubre de pronto ante si y ante el mundo… y quizá ante lo divino. Ésa es una experiencia de admiración de la que no hemos despertado todavía. La droga suprema es la vida humana, quizá sin necesidad de drogas exteriores.


- Drogoteca: Para ir terminando, me quedo con una sensación un tanto ambigua. Tal y como usted ha dicho que la Iglesia es o debería ser, sería en esencia un lugar de amor compartido, de ampliación de la propia conciencia, de tolerancia y de entrega a los demás... Vamos, que dan ganas de ir corriendo a pedir el bautismo!!
¿Está usted expresando un deseo o confirmando una realidad? Si el sacramento de la confirmación es la expresión de total unidad con el cuerpo de la Iglesia, y por ende la aceptación y obediencia a sus normas... ¿hasta que punto se puede considerar católico alguien que ni cree en todos los dogmas, ni acepta todas las reglas, ni práctica todo lo estipulado (como ocurre con la inmensa mayoría de los católicos)?

- Xabier Pikaza: He presentado, en parte, eso que llaman un “wishful thinking”, un pensamiento movido por el deseo de lo creo que debe ser la Iglesia. Pero, evidentemente, las cosas son después mucho más complejas y un tipo de iglesia ha corrido el riesgo de actuar como una institución de poder religioso, más que como una comunidad expansiva de amor.

Mira, el centro de la Iglesia son en sentido amplio los mandamientos y en sentido más concreto las bienaventuranzas y el amor al prójimo, vivido en referencia a Jesús.
Por otra parte, la Iglesia oficial dice muchas cosas, regula muchos aspectos de la vida, pero después no impone lo que ella dice. Además, bien mirados, los “mandatos estrictos” de la Iglesia son pocos. Lo que importa de verdad es crear comunión con los demás y amar, es decir, ayudar a los más necesitados. Si esto está firme, las otras cosas son secundarias y la Iglesia lo sabe bien.


- Drogoteca: Le pongo un par de supuestos y me dice usted si serían condenables según las leyes de la Iglesia, y si en su opinión esas condenas serían coherentes con el mensaje de Jesús.
Por ejemplo, una pareja de varones que se amasen, convivieran juntos y ocasionalmente (sin nada que ver con la necesidad o la adicción) tomasen juntos una droga que ampliase su percepción y conciencia, y terminasen la velada haciendo el amor.
Y en cierta distancia con ese ejemplo, otro: un adulto, que cumpliera en su vida laboral, en sus relaciones sociales, en sus deberes, y que de forma totalmente libre, para acudir a una fiesta decidiera tomar cualesquiera psicoactivos le parecieran mejores para disfrutar más de su momento de esparcimiento y embriaguez, nada sacralizada pero compartida con sus amigos. ¿En base a lo dicho, habría algo que condenar en esos actos según la Iglesia? ¿Y cree usted que Jesús tendría algo que condenar en esos comportamientos?

- Xabier Pikaza: Estos son temas para una discusión más amplia. La iglesia oficial acepta el amor homosexual como un hecho, aunque tiende a condenar el “uso” físico de ese amor. Influyen para ello una serie de condicionamientos y tradiciones difíciles de cambiar. Pero muchas personas de la Iglesia, incluso entre la jerarquía, están pensando que lo que importa no es tanto el hecho sino la “calidad” del amor homosexual. Ella tendrá que hacer un largo camino en ese sentido.
Respecto al segundo caso, lo que la Iglesia tiende a condenar es una “adicción destructora”, es la drogo-dependencia de la que he hablado antes. De todas formas, en general, la iglesia es muy prudente en este campo y tiene miedo a que por el camino de la droga se pueda destruir el tejido de la vida personal y de los compromisos sociales.


- Drogoteca: Un viejo amigo común me ha contado que usted ha apoyado activamente a algunos insumisos en el pasado, cuando el servicio militar era obligatorio. ¿Cree que por encima de la ley normativa se sitúa la legitimidad moral de una conducta?

- Xabier Pikaza: La iglesia ha defendido siempre la conciencia por encima de la ley. La ley sólo es obligatoria en la medida en que se expresa a través de la conciencia.

Por otra parte, en el caso del que me hablas, yo considero legítima la objeción de conciencia ante el servicio militar. Sí, actúe como testigo de defensa “religiosa y civil” en algún caso al final de franquismo y me siento contento por haberlo hecho.

Más aún, en esa línea, sería partidario de una objeción de conciencia global… que tendría que hacerse internacional, influir fuera del propio estado, creando redes internacionales de rechazo de las instituciones militares en cuanto tales (no en cuanto al servicio de seguridad). Pero éste es un tema que debería precisarse mucho más.


- Drogoteca: ¿Legalización de todas las sustancia, sí o no? Se sobreentiende que únicamente a disposición de todos aquellos adultos que las solicitaran, en condiciones de calidad farmacéutica y con toda la información accesible para una decisión libre y veraz.

- Xabier Pikaza: No entiendo la pregunta. Creo que no hay que legalizar ni ilegalizar ninguna droga. La ley no debería meterse en este campo, como no se metió durante siglos. La misma ley general, en cuando salvaguarda de la libertad y de los bienes comunes, bastaría para condenar los abusos o casos destructivos de las drogas.
Evidentemente, en este campo es necesaria una educación, como he dicho antes y una conciencia mayor del valor y también del riesgo de las drogas. Habrá drogas que requieran certificado farmacéutico y otras no. Eso deberán determinarlo los antropólogos y los médicos, no el Estado en cuanto tal.


- Drogoteca: ¿Algo más que quiera añadir? ¿Se anima usted a pasar por aquí en unos días y contestar a las preguntas que algunos le pudieran plantear si quieren?

- Xabier Pikaza: Ya he hablado demasiado. Entraré en drogoteca dentro de unos días, a ver cómo piensan los compañeros y amigos del blog. Muchas gracias por haberme invitado a ofrecer mi opinión, que no es “dogma de fe”. No estoy totalmente seguro de lo que digo.

Y como nota final me gustaría añadir que en la vida social son necesarias dos cosas: la fiesta y la profecía, el gozo y la justicia. Una droga/fiesta sin profecía o justicia acaba siendo pura pasividad, escapismo, ceguera o borrachera. Pero la profecía/justicia sin fiesta degenera en pura rabia, en cinismo y en elitismo destructor.


Pues muchas gracias a ti, Xabier, por haberte prestado a este interrogatorio y por haber expresado tu opinión, que sin ser dogma de fe, ofrece muchas líneas de discusión y muchos argumentos a plantearse y debatir. Sabiendo lo limitado de tu tiempo, gracias por regalárnoslo.

Y ojalá tus deseos, tu "wishfull thinking", y esa Iglesia que sería la portadora de un mensaje de amor y con una posición incuestionable al lado del necesitado y defensora de la total libertad del ser humano, sean algún día una realidad palpable y visible.